De: Raquel Suárez.
A: Roberto López.
Londres, 15 de abril 2011
Hola, hola, Roberto:
¿Cómo estás? Yo con ganas de ver el sol. Estoy aburrida de tanta lluvia, llevamos unas semanas que no para de llover. No me vale que me recuerdes donde estoy, ya con oírselo a mi madre tengo de sobra.
Te cuento, esta semana tengo unos días de vacaciones. Voy a ir a casa pero había pensado, que si te apetece, puedo pasar el viernes, sábado y domingo contigo. El domingo saldría directamente volvería directamente desde Madrid.
Besitos
Raquel
De: Roberto López.
A: Raquel Suárez.
Madrid, 15 de abril de 2011.
Hola, preciosa:
Uhm?, unos días por aquí. Bueno, vale, si no hay más remedio te acojo en mi humilde morada. Por cierto, ya perfectamente pintada, ¡y no gracias a ti!
¿Vienes vía Madrid? ¿Cuándo llegas?
Un besito
Roberto
De: Raquel Suárez.
A: Roberto López.
Londres, 15 de abril de 2011.
Hola, Roberto:
Perdona, cariño, siento decirte que el torpe pintando eres tú. ¿Quién si no se tiró el cubo de pintura encima? Je je je. A ver llego el lunes a Madrid pero me voy directa para Valencia.
Más besitos
Raquel
De: Roberto López.
A: Raquel Suárez.
Madrid, 15 de abril de 2011.
Preciosa,
Yo sería el torpe pero la culpa fue tuya por distraerme. ¿Te vas a Valencia en avión?
Otro besito
Roberto
Raquel no pudo evitar una sonrisa al ver un nuevo correo de Roberto. Nada más leerlo se puso manos a la obra. Nueva contestación.
De: Raquel Suárez.
A: Roberto López.
Londres, 15 de abril de 2011.
No, si al final la culpa es mía. Típico de ti. No esperaba otra cosa. No, no voy en avión para Valencia. Voy en tren. ¿No sales esta noche?
Besitos
Raquel
De: Roberto López.
A: Raquel Suárez.
Madrid, 15 de abril de 2011.
No, estoy roto. Mucho trabajo esta semana. Mañana será otro día. Podríamos vernos antes de irte a Valencia. ¿Te apetece?
Besitos
Roberto
Roberto le dio a enviar y se quedó mirando la pantalla del ordenador. Aquellos correos le hacían sentirla un poco más cerca a pesar de los kilómetros de distancia.
De: Raquel López.
A: Roberto Suárez.
Londres, 15 de abril de 2011.
¿Vernos? Cariño, estoy el tiempo justo de ir de Barajas a Atocha. No voy a estar más tiempo. Bueno, te dejo que yo sí he quedado.
Muchos besitos
Raquel
De: Roberto López.
A: Raquel Suárez.
Madrid, 15 de abril de 2011.
Siempre puedo recogerte y llevarte yo a la estación. A no ser que no te apetezca. Pásalo bien. Ya me cuentas.
Más besitos (mejor los guardo para cuando nos veamos)
Roberto
De: Raquel Suárez.
A: Roberto López.
Londres, 15 de abril de 2011.
¡Claro que tengo ganas de verte! ¿Sabes que voy a llegar tarde por tu culpa? Llego a mitad de mañana. No quiero que faltes al trabajo por mí. Ahora, apago el ordenador y me voy o ya no salgo.
Besos (tengo muchos guardados para ti)
Raquel
Raquel apagó el ordenador nada más darle a enviar. Sabía que si le entraba un correo nuevo ya no se levantaría de la silla. Claro que le apetecía verlo. ¿Cómo no iba a apetecerle? Si no se quedaba toda la semana con él era porque necesitaba ver a su familia, a los que echaba horrores de menos. Guardó el móvil en el bolso. Sí, sabía que tenía un correo nuevo. El Smartphone la avisaba pero no iba a abrirlo. Al menos no hasta no llegar a casa de Valerie. Menos mal que estaba a dos esquinas de su casa y no tenía que coger el metro, de no ser así llegaría tarde.
****
Nada más llegar a casa de Valerie escuchó las risas desde la puerta. Sí, era la última en llegar. Menos mal que todos la conocían y no iban a calificarla como la española tardona. Un par de nuevos pitidos le llegaron desde su bolso mientras tocaba el timbre. Seguro que era algún correo nuevo de Roberto. Ya le picaba mucho la curiosidad por saber qué le escribía. Tocó el timbre mientras rebuscaba el móvil en su bolso.
?Hola, debes de ser Raquel. ?dijo el chico que acababa de abrir.
?Sí, esa soy yo, al menos eso dicen. Yo, sin embargo, no sé quién eres. ?contestó sonriente dejando de rebuscar en el bolso.
?Soy Fran.
?Encantada, Fran. ?respondió con un par de besos. ?Hi, Valerie, perdona el retraso me he entretenido y se me ha hecho tarde.
?No pasa nada. Veo que ya os conocéis.
?Sí, ya nos hemos presentado en la puerta. ?dijo Fran sin quitarle la vista de encima a Raquel.
?Fran, ¿puedes venir?
?Perdón, chicas, creo que David me reclama.
?Este chico me gusta para ti. ?Le comentó al oído Valerie, nada más quedarse solas las dos.
?Val, no me estés buscando pareja. Sabes que yo no estoy buscando nada en estos momentos.
?Ya, ya sé que tienes a ese, ¿cómo se llama?
?Roberto.
?Sí, eso, Roberto, ¿pero es una relación con futuro?
?No lo sé. ?contestó con un mohín. ?Pero, ahora mismo estoy bien así.
?Tú misma. Anda, vamos que están todos esperando.
La noche pasó de lo más agradable. Valerie y David eran su familia londinense, los había conocido nada más aterrizar en Londres. Eran su contacto con España. David era gallego, Valerie inglesa, pero hablaba español a la perfección. David y ella se habían conocido en España a través del programa Erasmus. La noche de los viernes era su noche española. Cada viernes se juntaban unos cuantos en su casa y se prohibía terminantemente hablar en una lengua que no fuera español, era una especie de ?clase de español? para los amigos.
El reloj marcaba la una cuando Raquel entró en casa. Nada más soltar el bolso y el abrigo recordó que tenía correos por leer. Encendió el ordenador mientras cambiaba la ropa por el pijama. Nada más abrir su bandeja de entrada vio que tenía tres correos de Roberto.
De: Roberto López.
A: Raquel Suárez
Madrid, 15 de abril de 2011.
Preciosa,
No pienses en el trabajo. No hay ningún problema. Puedo permitirme el lujo de pasar a recogerte y llevarte a Atocha. Pásame hora de llegada que ya está decidido.
Besitos (adelantados)
Roberto
De: Roberto López.
A: Raquel Suárez
Madrid, 15 de abril de 2011
Soy yo otra vez. Supongo que ya te habrás ido. ¿Y si te quedas el lunes en casa y te vas el martes a primera hora a Valencia?
Un besazo
Roberto
De: Roberto López.
A: Raquel Suárez.
Madrid, 16 de abril de 2011
Hola, supongo que seguirás de fiesta. Te echo de menos. Olvídate de lo de antes. Es egoísta por mi parte. Querrás ver a tu familia y amigos. Ellos también te echaran de menos.
Creo que me iré a dormir.
Más besos
Roberto
A Raquel se le iluminó la cara leyendo los correos de Roberto. Uhm, quedarme en Madrid. No, no, si me quedo no me ven el pelo por Valencia. Sé con certeza lo que pasaría, pensaba mientras comenzaba a contestar.
De: Raquel Suárez.
A: Roberto López.
Londres, 16 de abril de 2011
Imagino que a estas horas debes estar ya en el séptimo sueño. Apenas acabo de llegar a casa, los viernes tenemos la ?noche española? en casa de unos amigos. Lo pasamos muy bien. Sí, la verdad es que sí, seguro que tú también lo pasarías bien.
Vale, si me quieres recoger estaré encantada. Ves por qué no te había dicho nada de recogerme, uno el trabajo, dos sabía lo que me dirías. Yo me quedaría encantada. De Hecho, me has tentado y mucho, pero mi familia también tiene derecho a verme, ¿no crees?
Se supone que a las once de la mañana, hora española, estoy en Madrid. Te avisaré si salimos con retraso.
Besitos (en el cuello)
Raquel
Raquel borraba el spam de la bandeja de entrada cuando un nuevo correo de Roberto llegó a su bandeja. La pilló totalmente por sorpresa. Pasaban de las dos de la mañana en Madrid.
De: Roberto López.
A: Raquel Suárez.
Madrid, 16 de abril de 2011.
Buenas noches, preciosa,
Me estoy imaginando tu cara de sorpresa al ver la llegada de mi correo. Me has pillado despierto. No tenía sueño y me he puesto a ver una película así que he escuchado el beep beep del móvil cuando entró tu correo.
Me alegro que te lo hayas pasado bien. Sí, seguro que me lo pasaría bien. ¿Cómo no hacerlo estando contigo?
Lo sé. Sé que tu familia tiene derecho a tenerte desde el lunes. Por eso, te escribí el otro correo aunque si te apetece? ya sabes que tienes casa y cama? donde, digamos dormir, aunque el horario infantil hace mucho que se ha quedado atrás, je je je. Bueno, nos entendemos.
A las once estaré en la terminal del aeropuerto como un clavo, a no ser que me avises de algún retraso horario.
Uhm?así que besos en el cuello, ¿cómo quieres que me vaya a dormir yo ahora?
Un mordisco
Roberto
De: Raquel Suárez.
A: Roberto Rodríguez.
Londres, 16 de abril de 2011.
¡Somos un desastre! ¿No somos capaces de enviarnos un correo y ya? Ja j aja, esto empieza a ser un círculo vicioso. Nada más terminar de escribir voy a apagar el ordenador para irme a la cama. Te recomiendo hacer lo mismo. Has de dormir este fin de semana, el próximo no voy a dejarte hacerlo?
Muaaaaack? muaaaaack
Raquel
Elva Marmed