En esta nota te habíamos mencionado algunos balnearios (naturales o artificiales) que estaban cerca de la capital y que son ideales para un fin de semana largo o un plan con amigos.
Ahora, para las y los amantes de la naturaleza y las actividades extremas como el rappel y la tirolesa, hemos preparado una lista con 15 extraordinarias opciones de destinos con ríos y lagos a menos de 4 horas de la CDMX.
Desde los más conocidos como Valle de Bravo o Tequesquitengo hasta cascadas escondidas en la sierra norte de Puebla, en esta lista encontrarás el destino ideal para tus próximas vacaciones.
1. Aculco, Estado de México
En medio de las montañas se esconde el pequeño pueblo de Aculco, un destino ideal si te gusta combinar gastronomía y naturaleza.
Aculco cuenta con la Cascada Tixhiñu, ideal si te gusta el rapel. Las fisuras y grietas de la cascada te permitirán bajar y ver de cerca la impresionante caída de agua de más de 25 metros de altura.
Una vez abajo podrás refrescarte en el caudaloso río Tixhiñu y contemplar el majestuoso paisaje que hay alrededor.
Después de tanta actividad física, pasa al centro a mirar su bella iglesia de cantera y prueba los deliciosos quesos que son la especialidad de Aculco. El queso Oaxaca ahumado te va a encantar.
Distancia de la CDMX: 144 km (aproximadamente 2 horas)
2. Valle de Bravo, Estado de México
Es como la vieja confiable de los viajes. El centro de toda la actividad de Valle es precisamente su lago.
Aunque el de Valle no es un lago natural (se creó después de la construcción de la presa Valle de Bravo) eso no quita que sea un destino ideal para todo tipo de espíritus: desde los aventureros hasta los más tranquilos.
En Valle de Bravo podrás desde arrojarte en parapente hasta disfrutar de un relajado paseo por el lago.
Y si todavía quieres más naturaleza, a solo 20 minutos del centro encontrarás la hermosa cascada Velo de novia, con una caída de 35 metros aproximadamente.
Los alrededores están acondicionados con mesas, bancos y asadores para que disfrutes de un helado o de algún antojito mientras observas cómo el agua se desliza sobre las piedras.
Distancia de la CDMX: 110 km (1 hora y media)
3. Tonatico, Estado de México
Un poco menos conocido que Valle de Bravo, pero no por eso menos bonito, Tonatico reúne varias bellezas naturales que seguro se ganarán tu corazón.
El principal encanto natural que tiene Tonatico son las Grutas de la Estrella, una serie de cavernas situadas al interior del Cerro de la Estrella.
Dentro de las grutas podrás hacer rapel en un acantilado de 15 metros de altura o bien recorrer el río subterráneo y, en temporada de lluvias, apreciar la increíble cascada que yace dentro de la montaña.
Distancia de la CDMX: 90 km (1 hora y media máximo)
4. Los Azufres, Michoacán
¿Quieres ir al spa pero sin gastar una fortuna? Entonces escápate a las aguas termales de Los Azufres.
Este paraje está justo en los límites de Michoacán y el Estado de México; el agua de sus lagunas se mantiene a una temperatura constante de 80 °C y están repletas de sales minerales que harán maravillas por tu piel.
Además, en este parque ecoturístico podrás encontrar géiseres, manantiales de lodo termal y actividades como senderismo, ciclismo de montaña y tirolesas.
Si vas a inicios de año, cerca de ahí encontrarás el santuario de mariposas monarca El Rosario, ubicado en Ocampo, Michoacán.
Distancia de la CDMX: 167 km (3 horas aproximadamente)
5. Mineral del Chico, Hidalgo
El Parque Nacional El Chico, en Hidalgo, es famoso por combinar paisajes boscosos con imponentes ríos, cascadas y manantiales.
El río conocido como El Milagro cruza todo el parque dejando a su paso hermosas caídas de agua y arroyos que te darán una sensación de paz y relajación; ahí podrás realizar actividades como rapel y senderismo.
Distancia de la CDMX: 167 km (2 horas y media)
6. Huasca de Ocampo, Hidalgo
Uno de los más únicos y espectaculares paisajes de México lo tiene Huasca de Ocampo y se trata de Los Prismas Basálticos.
Los Prismas son una serie de columnas geométricas de basalto que se ubican al pie una barranca. Sobre ellas corre el agua de la presa San Antonio que desemboca en cuatro cascadas.
Cerca de ahí están las haciendas de Santa María Regla y San Miguel Regla donde podrás recorrer sus establos, jardines y capillas.
Distancia de la CDMX: 174 km (3 horas aproximadamente)
7. Pinal de Amoles, Querétaro
El estado de Querétaro tiene mucho más que ofrecer que queso y vino. Aunque a primera vista parece un estado bastante árido, lo cierto es que tiene hermosos paisajes naturales escondidos.
Uno de ellos se encuentra en el municipio de Pinal de Amoles, un pequeño pueblo que se encuentra en la base de la Sierra Gorda de Querétaro.
Contrario al resto del estado, en Pinal de Amoles el clima suele ser frío húmedo la mayor parte del año, lo que da lugar a bellos escenarios boscosos cubiertos de niebla.
En el campamento Las Trancas, podrás conocer el Cañon de La Gotera y explorar los 200 metros de grutas así como concoer el Río Escanela.
También podrás disfrutar de la cascada El Salto, con una caída de 35 metros y que termina en una poza de de más de 15 metros de diámetro.
Distancia de la CDMX: 336 km (4 horas aproximadamente)
8. Alchichica, Puebla
En medio de dos voclanes: el Citlaltépetl y la Malinche se encuentra la Laguna de Alchichica, un antiguo cráter volcánico de más de 2 kilómetros de diámetro.
Si eres valiente podrás nadar en sus MUY frías y saladas aguas (la temperatura no pasa de los 20 °C), pero si no, hay varias actividades que puedes realizar.
Debido a su gran profundidad (70 metros) la Laguna de Alchichica es ideal para relaizar actividades como remo en kayak, relajados paseos en lancha, o senderismo por los alrededores de la laguna.
Con suerte encontrarás un cielo despejado que te permitirá ver a lo lejos el Cerro de Pizarro y el Pico de Orizaba.
Distancia de la CDMX: 304 km (4 horas aproximadamente)
9. Cuetzalan, Puebla
Cuetzalan, Puebla es un hermoso pueblo mágico ideal para los amantes de la naturaleza y el café.
Además de contar con calles empedradas y edificios blancos que le dan apariencia de pueblo de cuento de hadas, Cuetzalan cuenta con hermosos paisajes naturales como grutas y cascadas.
Una de ellas es la cascada de Las golondrinas, llamada así porque en las laderas del cañón hay un sinnúmero de nidos de aves de golondrinas cuyo canto se mezcla con el sonido del agua.
Además, podrás bajar a rappel por los 50 metros de caída de Las golondrinas, hasta llegar a una poza de agua donde podrás sumergirte y refrescarte.
Distancia de la CDMX: 287 km (4 horas aproximadamente)
10. Zacatlán de las Manzanas, Puebla
En Zacatlán de las Manzanas hay mucho más que sidra y café. Ubicado en la Sierra Norte de Puebla, Zacatlán tiene varios paisajes naturales para disfrutar en pareja o en familia.
Además del Valle de las Piedras Encimadas y la Barranca de los Jilgueros, Zacatlán también cuenta con hermosas cascadas, una de ellas es la cascada de Tulimán.
Tulimán es un parque ecoturístico en que podrás lanzarte en tirolesa, practicar tiro con arco, realizar senderismo de montaña, entre otras actividades.
En sus más de 90 hectáreas encontrarás ríos, manantiales y la cascada de Tulimán que en sus tres caídas suma una altura de entre 250 y 300 metros.
Distancia de la CDMX:
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