En la entrada que publiqué la semana pasada, os comentaba que hace unos meses decidimos hacer una escapada de lo más espontánea a Praga. Se trataba de la primera parte de mi guía para disfrutar a tope de ella y se centraba en el barrio Hradčany que se encuentra a pies del castillo de la ciudad y donde justamente alquilamos este bonito apartamento. No muy lejos de allí y a orillas del río Moldava, se encuentra un lugar muy especial que os recomiendo visitar. Al parecer es conocido como Náplavka (fotos 1 y 2) y se trata de un punto estrátegico que te permitirá disfrutar de unas vistas increíbles al casco antiguo, además de observar desde muy cerca unos cisnes de lo más sociables (y por qué no decirlo, tremendamente fotografiables). Y claro, una vez allí no hay mejor plan que cruzar el famoso puente Carlos (foto 3) que te llevará directamente a la Ciudad Vieja.
Allí os recomiendo perderos por sus callejuelas que se dispersan alrededor de la Plaza de la Ciudad Vieja (foto 7). Es increíble la cantidad de turistas que por allí hay, sobre todo a pies del famoso reloj astronómico de la ciudad (foto 8). Al parecer, ninguno se quiere perder el bailoteo que hacen las figuras que lo rodean cuando las manecillas marcan las horas en punto. Si os entra el apetito y se os apetece comer bien y saludable, os recomiendo el restaurante Café Elektric (Ovocný trh 6) que no os pilla nada lejos de allí. Se trata de un local muy chulo, donde sirven unos platos estupendos y muy bien presentados (foto 6). Si sois unos golosos empedernidos y queréis daros un capricho, podéis visitar la cafetería Cerná Madona (Celetná 569/34) situada justo debajo del Museo del Cubismo. Además de ser un lugar muy inspirador a la vez que elegante, tiene unas tartas impresionantes. De ahí que tomar un café allí, haya sido para mí tremendamente reconfortante (foto 4).
Si queréis llevaros algo de recuerdo que a la vez le podáis dar uso, os recomiendo que visitéis la tienda Manufaktura. Se trata de una cadena de tiendas de cosméticos checa, en las que podréis encontrar productos naturales y algunos de ellos hasta elaborados a base de cerveza. Y si al igual que a mí te encantan los museos de arte, no te puedes perder ninguno de los que te recomendé hace un tiempo en esta entrada. Uno de ellos era el museo de arte contemporáneo DOX (foto 10), que visitamos durante la última tarde de nuestro viaje. Justo al lado de este, se encuentra el restaurante The Eatery (U Uranie 18) que la verdad, ¡no os lo puedo recomendar más! Cenar allí fue una de las mejores experiencias gastronómicas que tuvimos hasta ahora y una manera bastante original de rematar esta escapada. ¡Y encima, con un buen sabor de boca! (foto 11).
¡Y aquí finaliza mi guía personal para difrutar a tope de Praga! Como habréis notado, yo cuando viajo me lo tomó con bastante calma y me dedico a disfrutar de los lugares camuflándome como un habitante más. Recuerda que puedes consultar esta guía al detalle y en movimiento, en las stories destacadas de mi perfil de Instagran. ¡Estoy segura de que te va a encantar! ¿Qué me decís? ¿Ya conocéis Praga? Si es así, ¿coincidimos en algún descubrimiento? ¿Qué es lo que más os gusta de esta ciudad?
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