Está ubicada en la elegante avenida Andrássy, en donde además encontrará numerosos lugares de interés, restaurantes y cafeterías en el barrio.
Historia de la Ópera de Budapest
La decisión de construir la Casa de la Ópera se hizo en 1873. Después de una licitación pública, el jurado seleccionó el diseño presentado por el famoso arquitecto Miklós Ybl (1814-1891). La construcción comenzó en 1875 y, a pesar de los retrasos menores, se completó nueve años después.
El 27 de septiembre de 1884 se celebró la noche de inauguración, a la que también se invitó al Emperador y al Rey Franz Joseph. El espectáculo de gala, dirigido por Ferenc Erkel y su hijo Sándor, contó con el primer acto de Bánk Bán, la obertura de Hunyadi László y el Primer acto de Lohengrin.
El palacio neorrenacentista de Miklós Ybl ha permanecido prácticamente sin cambios en los 130 años transcurridos desde entonces. Y continúa atrayendo admiradores tanto de ópera como de ballet. Cada año, miles de turistas visitan el edificio para admirar uno de los más impresionantes monumentos nacionales del siglo XIX en Budapest.
Arquitectura de la Ópera de Budapest
La Ópera de Budapest es un edificio ricamente decorado. Fue construido en estilo neo-renacentista, con elementos barrocos. La ornamentación incluye pinturas y esculturas de figuras destacadas del arte húngaro incluyendo Bertalan Székely, Mór Than y Károly Lotz.
A pesar de que por su tamaño y capacidad no está entre los más grandes, en belleza y calidad acústica la Ópera de Budapest se considera entre los mejores teatros de ópera en el mundo.
Fachada
La planta baja de suave pendiente bajo la fachada de piedra caliza acentúa la monumental naturaleza del edificio. Esfinges de mármol de Alajos Stróbl adornan las esquinas. Y sus estatuas de Ferenc Erkel y Ferenc Liszt se pueden encontrar en los nichos al lado de la entrada.
Por su parte las estatuas de las cuatro musas ocupan las bahías frente a las ventanas del área de refrescamiento. Mientras que la terraza superior está decorada con las estatuas de dieciséis compositores.
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Foyer
El vestíbulo está dominado por paneles de mármol de varios colores. La bóveda de cañón dorada está sostenida por ocho columnas de mármol, y sus arcas presentan las nueve musas pintadas por Bertalan Székely.
Por encima de las puertas y cajas en el lado más cercano a la entrada encontramos medallones con retratos en relieve de Mihály Mosonyi, Ferenc Doppler, János Hummen Nepomuk y Károly Goldmark.
La Gran Escalera
Este es uno de los aspectos más impresionantes de la Ópera de Budapest. Las ramas principales de la escalera conducen de los dos lados del vestíbulo directamente a las entradas del auditorio de la planta baja. Es por esto que el uso magnífico del espacio no se revela totalmente hasta que uno alcanza el entresuelo.
El techo reflectante de artesonado dorado presenta las pinturas de Mór Than en nueve plazas. Estas representan “El despertar y la victoria de la música”. Además, las decoraciones con escenas mitológicas sobre las ventanas son también su obra.
Está decorada con cuatro estatuas de mármol. Están las estatuas de Miklós Ybl, el arquitecto de la Ópera y Ferenc Erkel (1810-1893), primer director musical. Además, se pueden encontrar las estatuas del legendario intendente Conde Miklós Bánffy (1873 1950) y el único Kammersängerr imperial y real, Erzsi Sándor (1885 1962).
Auditorio de la Ópera de Budapest
El auditorio de tres pisos tiene forma de herradura y proporciona una experiencia impresionante. Sus magníficos colores rojos y dorados, la composición relajada y armonizada con el fresco del techo y la suntuosa lámpara de bronce hacen de este el espacio más memorable de este edificio. Cada nivel está decorado de forma diferente, pero la imagen general es única y armoniosa.
El techo redondo está decorado con la monumental cúpula de Károly Lotz. Con el título de Apoteosis de la Música, el fresco crea la perfecta armonía estilística con el tranquilo estilo renacentista del auditorio. La composición está dominada por Apolo, mientras que los dioses olímpicos escuchan su música acompañado de las gracias, musas y demonios.
Miklós Ybl diseñó el candelabro de araña en Maguncia. Con la ayuda de un torno, la araña se baja al nivel de la planta baja dos veces al año para reemplazar sus bulbos.
Las cajas están decoradas con balaustradas doradas y apoyabrazos. El espacio entre ellas se divide con barandillas hechas de estaño dorado y formadas para parecerse a estilizadas hojas.
Otros espacios admirables de la Ópera de Budapest
Escalera Real
Una entrada privada desde la rampa del carruaje en la calle Dalszínház conocida como la escalera real conduce a los salones en el primer piso. El vestíbulo de la planta baja está dividido en 17 secciones y decorado con pilastras con tema musical. Hay dos estatuas de bronce de pie al lado de la escalera.
La galería de arriba en la parte superior de la escalera real es una de las habitaciones más bellas de toda la Ópera de Budapest. Ofrece un lugar para exposiciones temporales de los objetos de recuerdo del teatro.
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Salón Bertalan Székely
El salón en la caja de proscenio del lado izquierdo, es conocido como el Salón Bertalan Székely. Se puede acceder a él desde la galería de arriba, encima de las escaleras reales.
El vestíbulo está decorado con ricas tallas de roble en las que el rasgo dominante es el friso rococó de Székely, conocido como Las Cuatro Estaciones. Esta sala acoge actualmente recitales y conferencias de prensa.
Salón Rojo
El Salón Rojo, es el preámbulo de la caja real y recibió su nombre de sus paneles de roble y cortinas color cereza. Se encuentra en el primer piso. Las paredes y el techo están decorados con un ciclo mitológico de Mór Than.
La caja real se abre desde el salón, que hasta el día de hoy permanece cerrado al público. Las representaciones sólo pueden ser vistas desde esta caja por los dignatarios más importantes de Hungría y sus invitados.
Bar Feszty
El Bar Feszty tiene un techo bajo y está adornado con paneles de roble noble. Es rodeado por un pasillo para fumar decorado con cortinas de oro azul.
El techo del vestíbulo está ricamente decorado en dorado. Además, presentan pinturas del nacimiento y la educación de Dionisio por György Vastagh. Las paredes, a su vez, están decoradas con pinturas de paisajes de Árpád Feszty e Ignác Újváry que evocan varios motivos.
Eventos
Como ya dijimos, una visita a la Ópera de Budapest no tiene que significar que asistas a alguno de sus eventos. El edificio es magnífico por sí mismo y debería ser una visita obligada si estás en la ciudad. Sin embargo, si eres amante del arte, nada mejor que disfrutar de alguno de sus eventos.
Puedes elegir entre 50 actuaciones importantes, incluyendo óperas y ballets durante la temporada principal entre septiembre y mediados de junio.
Además, hay varios programas del Festival de Primavera de Budapest y el Festival de Otoño de Budapest. Estos tienen lugar en la Ópera de Budapest.
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