Hemos pasado un fin de semana genial en Asturias, que como ya sabes es protagonista de la sidra, la fabada, los hórreos, y hemos realizado una mini ruta muy bonita con la niña descubriendo varios pueblos y sobre todo un lugar del que te hablaré en otro post y que nos ha dejado con la boca abierta.
Pero este post en particular va dedicado al bonito pueblo pescador de Lastres. Casitas empedradas, estrechas y bonitas callejuelas y unas vistas impresionantes al mar, hicieron que nos quedáramos toda una mañana en este bonito lugar de Asturias.
No se como serían los vecinos protagonistas de la famosa serie, tengo que reconocer que nunca la vi, pero en realidad su gente es muy amable y los pescadores que estaban en el puerto, con una gran amabilidad, dieron una pequeña lección de pesca a mi hija. Nos reímos mucho con ella, cuando la pequeña le dijo a uno de ellos que pensaba que todos los peces se pescaban con caña!, la explicaron como se hacía en realidad y la niña ponía cara de asombro. Por lo menos ya sabía que no salían directamente del supermercado jajaja, así que ha sido una gran lección para nuestra hija. Viajar es educar ¿recuerdas?
Además hemos comido de lujo en un pequeño restaurante con vistas al mar. El restaurante en concreto se llama Marbella y por 15 euros cada uno nos hemos puesto las botas, pero lo mejor de todo es que estaba riquísimo.
Me encantan este tipo de lugares, bonitos, tranquilos, rústicos a unos pasos del mar y si además están cerca de Vizcaya mejor, mas posibilidades de poder volver a repetir Lastres en Familia.
Nuestra primera parada en Lastres fue en lo alto para disfrutar de su panorámica, desde donde vimos dos esferas enormes y mira por donde cuando pregunté por ellas en la oficina de turismo me contaron lo que eran, así que la niña enseguida dijo ¡Quiero ir! ¿se puede? como te puedes imaginar fue nuestra segunda parada del día, pero de esto os hablaré en mi siguiente post, un post enorme y antiquísimo ¿adivinas de qué se trata?.