Rostock es una ciudad que se encuentra al norte de Alemania, a orillas del mar Báltico (uhhh frío fríoooo) y que en su día perteneció a Alemania del Este. Es pequenya (sorry, actualizo desde el trabajo: teclado alemán), tiene sólo unos 200.000 habitantes, y por lo que me han comentado y he visto de momento, no salen mucho de sus casas jeje. El clima es muy húmedo y bastante fresquito, aunque se supone que la cercanía del mar suaviza las temperaturas en invierno (eso espero). Lo malo es que eso también se vuelve en mi contra, porque se ve que hace un viento que refrescaría hasta el infierno. De momento me han recibido el sol, la lluvia y un fresquito que no molesta, que supongo que con los meses se convertirá en un frío polar que dará gusto, menos mal que voy preparada!!
Como podéis suponer, es una ciudad que en invierno no tiene una actividad social excesiva, pero bueno, para eso estamos nosotros. Ayer fui a tomar mi primera pinta en Alemania y no había casi nadie en los bares, aunque espero que fuera porque era domingo y estaban todos en el brunch tan típico de aquí.
Arquitectónicamente, la ciudad me ha parecido bonita (venía yo con la idea de que era fea y no lo es), con diferentes iglesias que merece la pena ver, un puerto por el que todavía se puede pasear sin que se te lleve el viento y unas casitas de colores muy graciosas que fotografié ayer y que este maldito ordenador no me deja subir. De todas formas podéis ver alguna en el Facebook de Qué cuenta la rubia (sí amigos, publicidad). Hay que destacar que en la iglesia de Santa María hay un reloj astronómico precioso que es de los más antiguos del norte de Europa, también tengo fotos pero las dejamos para otro post.
Estoy trabajando en un instituto de catálisis bastante prestigioso, lo que me enorgullece mucho y me anima a aprovechar la oportunidad al máximo...además vivo a 5 minutos del trabajo, cuando el tiempo se ponga feo sé que lo agradeceré muchísimo. Como curiosidad, la Universidad de Rostock es la más antigua del norte de Alemania (fundada en 1419) y tiene bastante prestigio, aunque la ciudad en sí (como la mayoría de Alemania del Este) es un poco "pobreta", por decirlo así. Comentaros para los que os guste el ciclismo, que Jan Ullrich nació aquí
Hoy ha sido mi primer día de curro y las costumbres de los alemanes empiezan a asomar...hemos empezado a las 8 de la manyana y a las 11:30 ya nos hemos ido a comer. No almorzar, no tentempié: COMER. Con su primer plato, segundo, postre y lo que haga falta en unos tres cuartos de hora. Y a seguir trabajando hasta aproximadamente las 17:30 (gran horario), pero he de deciros que no creo que salga ningún día tan pronto. Eso de salir pronto...son los padres. Ya os iré contando... :)
Besitos y disfrutad de los últimos coletazos del verano en Spain!!
Fuente: este post proviene de Qué cuenta la rubia, donde puedes consultar el contenido original.
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