Castillo de Olite, Navarra
En el momento de su construcción, el Palacio Real de Olite fue considerado uno de los castillos medievales más lujosos de Europa pero en 1813 y, durante la Guerra de Independencia, el general Espoz y Mina provocó un incendio que lo destruyó por completo. Su objetivo: evitar que las tropas francesas se hicieran fuertes. Teobaldo II, Carlos II o Carlos III fueron algunos de los reyes que vivieron ahí.
Curioso es que el castillo de Olite conste de dos palacios, uno construido al lado del otro. El primero de ellos es el actual Parador de Turismo, que data del siglo XII-XIII, y de él solo se conservan las torres y los muros. El segundo, del siglo XIV-XV, es considerado como "El Palacio Nuevo" y fue reconstruido íntegramente en el siglo XX. Esta fortaleza tuvo también una nevera real, unos jardines colgantes y hasta un pequeño zoológico con jirafas, leones, camellos y todo tipo de aves.
Exterior del Palacio Real
En 1913 fue adquirido por la Diputación Foral de Navarra y 25 años después se inició una minuciosa restauración que le da su imagen actual. Hasta Gustavo Adolfo Bécquer le dedicó un ensayo.