Casa del Duque
Llegamos a Comillas, sin querer atravesamos el pueblo con el coche y vaya cuestas! a mi juicio aquello era casi conducción extrema (vale, donde yo vivo no hay ni una sola cuesta)... pero ¿y dónde íbamos a aparcar? pues acabamos dejando el coche en un camino justo delante de una mansión preciosa, aunque digna de película de miedo: la Casa del Duque.
Pasamos también por el parque donde está el Monumento al Marqués de Comillas y las vistas desde allí al pueblo y la playa eran preciosas. Bajamos al pueblo en busca de un lugar para comer, pero era hora punta y había colas en todos los restaurantes. En la plaza al lado de la iglesia hay montón de restaurantes con menús del día baratos, aunque nosotros no tuvimos mucha suerte. Comimos 2 platos y postre por 12 € pero la comida no valía nada. Si conoces algún sitio que merezca la pena para comer en Comillas te lo agradecería en un comentario porfis :).
Luego tomamos un café ligero y ya nos fuimos a turistear. Aunque Comillas también es un pueblo con mucho encanto no tiene nada que ver con Santillana. También tiene sus callecitas de piedra, sus casas bien cuidadas con balcones de madera y flores y muchas, muchas cuestas. Sin embargo no tiene mucho que ver con Santillana puesto que Comillas tiene vida más allá del turismo.
Entramos también en una tienda de ultramarinos para comprar nuestra cena (una empanada riquíiisima) y por supuesto nuestra primera visita turística fue al Capricho de Gaudí, la visita estrella de Comillas y una joya del modernismo. ¿Sabías de su existencia? fue una de los primeros encargos que realizó Antoni Gaudí. Aprovechamos para verlo por dentro porque la vez anterior que vine era una pizzería y no admitía visitas.
En mi opinión merece más la pena por fuera, aunque tendrás que pagar la entrada igual. El Palacio del Marqués de Comillas también es precioso por fuera y por dentro. Si tienes tiempo te recomiendo visitarlo.
Capricho de Gaudí
Palacio de Sobrellano
Como ya estábamos un poco cansados decidimos volver. El jardín bucólico de la posada nos estaba esperando con 2 cervezas bien frías y ese entorno de película. Cantabria es preciosa, pero uno de los mejores recuerdos que íbamos a traer a casa serían los desayunos y las cervezas en aquel jardín con esas vistas a los montes verdes, la llovizna, el olor a naturaleza (que no a m**** de vaca). Aprovecho el final de esta visita turística a Santillana del Mar y Comillas para dejaros también esta lista: >> Cosas que hacer en Cantabria. Mañana más :)
>> Surf en San Vicente de la Barquera <<