Santillana del Mar, Cantabria
Se la conoce como la Villa de las tres mentiras porque ni es santa, ni llana y ni tiene mar. La villa se organiza prácticamente en torno a dos calles principales, por las que es muy agradable y tranquilo pasear. En ellas encontrarás numerosas tiendas de vecinos de Santillana del Mar, vendiendo productos típicos de la región y por supuesto bares y restaurantes.
Santillana del Mar, Cantabria
Estas dos calles te llevan a dos plazas, la del mercado y a la religiosa por encontrarse allí la Colegiata de Santa Juliana y su claustro, declarado Monumento histórico-artístico y Patrimonio de la Humanidad, además de estar incluido como uno de los bienes del Camino de Santiago.
Colegiata de Santa Juliana, Santillana del Mar, Cantabria
Otro de los monumentos de interés que podrás ver en Santillana del Mar, es el Palacio de Velarde, conocido también como Palacio de las Arenas, de arte Renacentista y construido en el s.XV.
Palacio de Velarde, Santillana del Mar, Cantabria
Aunque sin duda, el atractivo más importante que posee Santillana del Mar son las Cuevas de Altamira, situadas a un par de kilómetros del centro del pueblo. Fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1985. Junto a la cueva se encuentra el Museo de Altamira, que contiene una réplica y una exposición permanente sobre el arte rupestre de Cantabria.
Bar El Estanco, Santillana del Mar, Cantabria
Y como último consejo, para comer os recomiendo Bar El Estanco, está en una de las calles principales, cercano a la Colegiata, muy buenas tapas y platos a elegir y sidra natural buenísima.
Santillana del Mar es, al igual que San Vicente de la Barquera, una parada obligada cuando visites la maravillosa tierra que es Cantabria.