Nos invitaron a pasar un fin de semana en Aguilar de Campoo en Palencia, para disfrutar en familia de dos días de actuaciones teatrales en la calle para los niños y nos han alojado en el increíble Hotel Posada Santa María la Real ¡Una maravilla!
Solo tengo halagos para esta bonita Posada, el entorno, la atención del personal, las habitaciones tan coquetas y originales. Fue muy divertido saber que las habitaciones eran las antiguas caballerizas del monasterio. Tienen dos alturas, lo mas curioso es que en la parte alta están dos comodisimas camas con carta de almohadas, donde paredes y techos de madera nos proporcionan una estancia muy acogedora.
Pero además ¿qué te parece si te digo que por ser huesped de la posada el comer y cenar allí resulta mas barato?. Recomiendo totalmente ir a su restaurante, todo está riquísimo y nada caro. Por un menú de 15 euros comerás de cine, y además tal y como he comentado antes, si estás alojado allí te cobrarán menos ¿increíble verdad? es la primera vez que un hotel donde he estado ofrece este pedazo detalle a sus huéspedes.
No te imaginas lo que le gustó a mi hija la habitación, eso de tener las camas en la planta de arriba la alucinó, pero es que además la cosa no terminaba allí, este mágico lugar nos deparaba mas sorpresas.
Resulta que el monasterio además de ofrecer esta increíble Posada, también ofrece la posibilidad de disfrutar de una visita guiada , y para que a los niños se les haga mas ameno y divertido, contarán con la compañía de un enorme muñeco llamado Marcelino, ah!! y una vez terminada la visita, descubriendo su molino, sus aposentos, sus rincones y su inesperado espectáculo de luz, sonido y color, obsequiarán a los pequeños con un bonito cuento. ¿Qué te parece?
Este verano he tenido la suerte de alojarme en diferentes lugares, de muchos de ellos me llevo buenas experiencias como en el hotel de Ibiza, Costa Amalfitana, Formentera, Roma, de otros no me llevo tan buenos recuerdos como es en el caso de mi alojamiento en Arcachon, Francia, toda una decepción pero ¿y si os digo que no me importaría que lloviera de nuevo en pleno agosto cerca de Aguilar de Campoo?, ahora que se de la existencia de esta bonita Posada, no me importaría nada pasar allí mi fin de semana entre misterio, confort; rodeada de un espectáculo de luz, sonido y color.