He de confesaros previamente a mi crítica sin spoilers que la primera temporada, a diferencia de a medio mundo, no me encantó. Me explico. Me pareció una serie muy trabajada y con un potente mensaje, pero también que en algunos momentos el ritmo se volvía irregular y seco. Además, yo me leí la novela antes de ver al serie, cosa que influyó muchísimo. Si os cuento esto es para que entendáis mi punto de vista de cara a esta temporada. Sin más preámbulos… ¿Empezamos?
The Handmaid’s Tale – Lo peor aún no ha pasado
El inicio de esta segunda temporada nos deja en el mismo momento en el que nos dejaron la primera, con June en la furgoneta, sin saber si donde se aventuraban era el cielo o el infierno. Y con una puesta en escena magnífica (con los nervios y sentimientos a flor de piel) descubrimos que no todo el mal que había pasado. No era el fin, era solo el comienzo. ¿Por qué? Porque June llega a un centro de castigo para criadas. Ella y todas las demás chicas que decidieron no lapidar a Janine recibirán el castigo por sus actos.
Cabe destacar que el capítulo no solo se centra en el presente, vuelve a enseñarnos flashbacks del pasado de la protagonista. De cómo toda la sociedad pasó de vivir en calma, a vivir en esta sociedad atípica. Y es esta parte de la serie la que a mí me gusta y agradezco que nos enseñen. La esencia de la serie no es tanto cómo es y se vive en esta sociedad sino por qué llegamos a ésta. Es decir, qué la originó, cómo fue apoyada, qué resistencia hubo, etc.
¿Dónde está Wally? Quiero decir Emily
Otra incógnita que nos dejó la anterior temporada, aparte de la ya comentada, fue qué le pasó a Emily. Lo último que supimos de ella fue la extraña operación que le hicieron. Si el primer capítulo se centraba en June completamente, el segundo se centra en Emily y su situación actual. Vemos a una Emily que vive (si ha eso se le puede llamar vivir) en las Colonias en situaciones horribles y como una esclava de trabajo (mano de obra en los campos y a la vez médica).
Y no solo esto, también vemos algo nuevo totalmente, y es el pasado de Emily a través de flashbacks. Esto solo hace que confirmar lo que he dicho antes. La mejor parte de The Handsmaid’s Tale es la profundización de los personajes y, en esta segunda temporada, nos ofrecerán diferentes puntos de vista.
The Handmaid’s Tale – Conclusiones
El punto fuerte de este inicio de temporada ha sido perfecto para resolvernos las dudas que todos teníamos al acabar la primera. El que continúen con los flashbacks en esta temporada es todo un acierto y más si se relatan cosas tan interesadas como las vistas en estos primeros capítulos. Además, el giro de 180 grados que de la trama de June es algo que nos dejará enganchados delante del televisor. Quiero destacar por último algo que me ha parecido una maravilla, y es la dirección. La manera con la que juega el director para enseñarnos los hechos nos permite meternos más en situación y en el sufrimiento de los personajes, algo increíble. Empatizas con los personajes desde el primer momento.
Por otro lado hay algo que no es que vea como negativo, pero sí que puede volverse como tal. Me refiero a la trama de Emily. Con lo que hemos visto en el segundo capítulo de cómo se vive en las colonias ya nos hacemos una idea general, y si los siguientes capítulos entran en modo de bucle sobre esto, tendremos un problema de ritmo.
En resumidas cuentas… Este inicio temporada empieza sin andarse con rodeos y con mucho dinamismo. Si ya te gustó la primera, ésta te gustará más. En el caso de que no te encantara, esta segunda temporada te puede ayudar a conectar con las protagonistas. Como siempre, ¡gracias por leernos! Nos vemos en La Sexta Butaca.