Si de algo quería escribir hace tiempo, era precisamente de esto. Y quien me iba a decir a mí, que esta entrada un tanto olvidada en mi carpeta de borradores, iba a ser tan necesaria. Desde hace semanas el tema del coronavirus, nos afectado absolutamente a tod@s de una u otra manera. Nos ha obligado a redefinir de golpe todas nuestras actividades sociales, de ocio y laborales, convirtiéndose nuestra casa en el único lugar donde podemos desempeñarlas. Pero no queda otra que adaptarse a esta nueva situación, para que podamos sobrellevarla lo mejor posible porque parece que puede alargarse. No sé si lo sabréis, pero yo estoy más que acostumbrada a trabajar desde casa y hasta disfruto de ello. Entre otras cosas, me permite ser más eficiente, organizarme mejor y mantener el estrés a raya.
Pero sé que no a todos vosotr@s os pasará lo mismo, y probablemente esta situación os haya pillado por sorpresa. Por eso, he decidido compartir una serie de consejos que he ido aprendiendo a lo largo del tiempo y todos ellos, son resultado de mi experiencia. Van dirigidos tanto a esas personas que decidisteis apostar voluntariamente por trabajar desde casa, como a esas otras que lo estáis haciendo obligatoriamente desde hace semanas. Os aseguro que funcionar, funcionan. Y que si conseguís ponerlos en práctica de manera rutinaria, notaréis que no solo seréis más eficientes (es decir, que haréis más y mejor, en menos tiempo) sino que afectarán de una manera muy positiva a vuestro ánimo, motivación y rendimiento.
Consejos prácticos para lograr trabajar de manera efectiva desde casa:
1. Si es posible, trabaja siempre en el mismo lugar y a las mismas horas
Es esencial que desde el primer momento, establezcas unos horarios fijos en los que desempeñarás tu jornada laboral. Pero más importante aún, es que lo hagas con cabeza y de una manera compatible con tus necesidades o estilo de vida. Trabajar a las mismas horas y en una zona de trabajo a tu medida, te ayudará a concentrarte mejor. Y también, a ser más eficiente y a conseguir llevar a cabo una rutina de horarios y hábitos saludables.
2. Organízate y planifícate muy bien (y a poder ser en papel)
En mi caso, anoto todas las citas fijas e importantes a recordar en una agenda. Para conseguir más fácil mis objetivos, intento escribirlos cada día antes de empezar a trabajar. Y no solo lo hago diariamente, sino que también lo hago de manera semanal o mensual. Si sabes exactamente qué tienes que hacer y cuándo lo tienes que hacer, será más fácil que lo puedas conseguir. Y lo mejor, sin prisas, disfrutando de ello y a tiempo.
3. Crea una zona de trabajo a tu medida
Si por una razón u otra, tienes que trabajar de una manera indefinida desde casa, necesitarás estar preparad@. En mi caso, tengo la suerte de tener una habitación independiente que dedico solo al trabajo. Si este no es tu caso, porque o bien no tienes tanto espacio o lo de tener que trabajar en casa te pilló de sopetón, te recomiendo que busques un rincón agradable para instalarte. A poder ser, cerca de una ventana y en el que predomine la tranquilidad. Si ya tienes un escritorio al que puedas darle uso, ¡genial! De lo contrario, puedes reutilizar algo que tengas por el trastero, mover algún mueble de sitio e improvisar. Tira de ingenio y practicidad, y crea (¡pero ya!) una zona de trabajo a tu medida.
4. Vístete con ropa cómoda y arréglate
Hazlo siempre, aunque no tengas pensado salir a la calle. Te aseguro que trabajar bien vestid@ y arreglad@, solo trae beneficios e influye positivamente, tanto en tí como en los que te rodean. Además de ser algo muy práctico, si de repente te llaman por videoconferencia o te traen un paquete. De esta manera siempre te verás bien y estarás presentable. Aprovecha para ver la parte positiva de trabajar desde casa, haz inventario de armario y adáptate. Ponte ropa cómoda que no te apriete ni te incomode al sentarte, pero que te guste y te haga sentir bien. Reinventa algún estante de tu armario y llénalo de looks salvavidas, para darle vidilla a esas jornadas de trabajo caseras que te esperan.
5. Evita distracciones como la televisión o el teléfono móvil
Y más ahora que nunca, que no se hace otra cosa que hablar de desgracias y calamidades. Mantente positiv@ y no consumas contenido tóxico. Y si te gusta estar informad@, hazlo de manera responsable y desde medios oficiales. No solo porque vas a perder mucho tiempo y energía con esto, sino porque no te va a aportar nada positivo. No trabajes cerca de la televisión, dale la vuelta al móvil y si es necesario ponlo en silencio. Dile a tus seres queridos y contactos que te ayuden con esto y déjales claro, cuando estás y cuándo no estás disponible para hablar.
6. Haz todas las pausas que veas necesarias para reponerte
Establece horas fijas para comer, merendar o tomar el café. No lo hagas durante mucho tiempo porque entonces, te costará mucho retomar lo que estabas haciendo. Disfruta de un café en tu balcón o asómate un poco a la ventana, para sentir el aire o los rayos de sol en la cara. Dedícate tan solo a desconectar y céntrate en esas cosas, que para ti son motivadoras o gratificantes.
7. No trabajes con ruido de fondo si debes concentrarte
Sé que este punto, no será del todo aplicable a las personas que tengan que trabajar en casa y a la vez hacerse cargo de hijos, enfermos o mayores. En mi caso, no tengo estas responsabilidades y por eso, lo tengo bastante más fácil. Trabajar concentrad@ y sin música, radio u otros ruidos de fondo, te aseguro que va a mejorar significativamente tu rendimiento. Opta por poner unos tapones de oídos si fuese necesario y también por hacer las tareas más difíciles, en esos momentos del día que tienes más energía o predomine el silencio.
8. Lo que hagas, hazlo bien y no pases a lo siguiente, sin acabar lo que tengas pendiente
Concéntrate en lo que tengas que hacer y haz las tareas de una en una. Lo que hagas, hazlo bien, e intenta ser más eficiente haciendo más cosas en menos tiempo. Aunque al principio te cueste, te aseguro que aprender a concentrarse y centrarse tan solo en el presente, tan solo trae beneficios positivos. Entre otras cosas mantendrás el estrés a raya, estarás menos nervios@ y no llevarás innecesariamente al límite a tu cuerpo ni a tu mente.
9. No subestimes el efecto positivo que tienen los hábitos saludables en tu rendimiento
Mantente positiv@ continuamente, come de manera saludable y muévete. Tampoco te olvides de beber suficiente agua y airear de vez en cuando, la habitación donde trabajes. Si no puedes salir a hacer deporte fuera, haz rutinas de ejercicios en casa compatibles con tus posibilidades. Por ejemplo, yo uso casi a diario la aplicación Seven que no os puedo recomendar más. Acuéstate temprano, mímate y no consumas contenidos con los que te afloren las emociones negativas. Rodéate de gente que te aporte y aléjate de los vampiros de energía o catastrofistas. Aprovecha las horas de luz, habla a diario con tus seres queridos y convéncete de que todo va a salir bien.
10. Y lo más importante, ¡aprovecha para aprender y reinventarte!
En el caso de que estés desemplead@ o esta situación te haya interferido en algún proceso de selección o búsqueda de empleo, aprovecha tu tiempo libre para prepararte y reflexionar sobre lo que realmente te gusta y quieres hacer en un futuro. Anímate y empieza a desarrollar ese proyecto profesional que tenías pendiente o que siempre quisiste hacer. Mejora tus conocimientos de idiomas de forma autodidacta o anímate a formarte mediante cursos online. Yo lo hago a través de Domestika, y no me puede gustar más. Todo pasa y cuando llegue ese momento, podrás aprovechar para ponerte de nuevo en marcha. Y esta vez, más preparad@, motivad@ y con más ganas que nunca de comerte el mundo.
Y hasta aquí ha llegado el post de hoy. Espero que os haya resultado útil y os haya inspirado. Contadme qué tal estáis llevando la situación, si estáis trabajando desde casa o no. Y claro, no dudéis en compartir cualquier otro consejo que nos ayude a tod@s a trabajar mejor desde casa. Y mientras os decidís si lo hacéis o no, aprovecho para mandaros un abrazo enorme y mucho ánimo. Sobre todo a esas personas que sí o sí, tenéis que seguir saliendo a trabajar a diario o a esas otras que justo ahora, estáis pasando por un proceso de salud complicado. Cuidaros mucho y aquí me tendréis cada viernes, para entreteneros y ayudaros en lo que sea necesario.
¡Espero impaciente vuestros comentarios! Y como siempre os espero en Twitter y Instagram, donde comparto mi día a día y un montón de recomendaciones más.