Un paso hacia la gloria, una frase que puede ser muy novelesca pero es que la visita de este sitio nos mete en una aventura novelada de la edad media; ese ambiente entre místico y oscuro que nos lleva a otras dimensiones; algo tienen las catedrales francesas que lo envuelven todo de ese halo de no ser de ningún tiempo ni de ninguna época.
El camino es lento a lo largo de las calles de este pequeño pueblo; siempre ha sido pequeño y sin embargo tiene uno de los templos más gloriosos y más inmensos del gótico normando. Cuando los caballeros era guerreros del rey y de Dios. Quizás por eso sus orígenes se funden con la persona de Saint Louis (de 1240 a 1248)quien levantó esta hermosura para albergar la corona de espinas de Cristo y las reliquias de la pasión.
Su verdadero nombre es la Catedral Notre-Dame de Sées; cuatro edificios precedieron a la gran nave gótica quizás para preparar el camino y tener como resultado lo más hermoso de este especial arte en piedra; allí donde la oración se hace batalla y la batalla es una letanía de penitencias. Fue comenzada en 1210 precisamente por la nave tan especial que la caracteriza y se terminó el crucero y el coro a finales del siglo XIII, a partir de este momento se fueron engrandeciendo más y más su mole pétrea hasta llegar casi a nuestro siglo todavía en obras. Ahora un remozamiento la está dejando bella y seria, oscura en la noche y primer saludo al sol puesto que está orientada al este.
Y delante de su fachada nos quedamos mudos ante las caras medio destruídas de sus apóstoles en la gran puerta, el trabajo de reconstrucción va lento y creo que no llegaremos a verla luciendo sus piedras limpias y limadas de nuevo. Es una pena porque el espectáculo será algo especial. Le damos la vuelta como en un ritual, la flechas al cielo restauradas en 1978, la vista lateral nos da la impresión de que se trata de un gran barco, quizás el barco de San Pedro que se echa al mar de las almas… algo hay escrito sobre ésto en uno de sus enormes libros.
Poco a poco nos vamos acercando hacia su entrada, las figuras aún presentan ese aspecto deteriorado por el paso del tiempo, debe de ir el trabajo de reconstrucción más de prisa; la Virgen no tiene su cabeza original, se la llevaro al Louvre quizás por considerarla demasiado valiosa para estar a la interperie.El tímpano de la “Maestra Puerta” está en tal estado que es difícil de distinguir los temas que lo adornaban, poco a poco todo se andará, y sin embargo nos da cierto repelús mirar esos huecos vacíos…entramos en el túnel del tiempo…
La gran nave de los siglos XIII y XIV está considerada como la más audaz del período gótico; quizás porque sus formas nos parecen imposibles. La nave llega hasta el coro y se abre como los brazos hacia los cruceros considerados como los más perfectos y puros del gótico normando del XIII siglo. Es una decoración que baja y sube, dentro de la simpleza y que juega con la luz de sus vidrieras a la noche y al dia y es precisamente el coro el primero que se inunda de la luz del día cuando el sol saluda desde lo alto. La característica flor del arte normando se coloca al borde de las grandes columnas de tal modo que parece oler al peregrino, una bella estampa que podemos fácilmente imaginar.
El triforio es una característica más de esta catedral que no hemos visto repetida nada más que en la Abadía de Ardenas, es como un claustro que está suspendido en las alturas con columnas más pequeñas que le acercan al suelo; el sello normando viene dado por el friso horizontal de cuatro hojas. Una de las esculturas más importantes del templo es el Jesús de Saez, obra de Bernin (1598-1680) realizada en Roma en 1678 para la reina Cristina de Suecia. Monseñor ofreció este busto a la catedral ya que fue Obispo y benefactor de la ciudad de Sées y su catedral hacia 1780. Tendremos también un rato para la Virgen Reina que lleva corona y cetro y el Hijo que presenta a su madre al mundo en forma de manzana. Esta Notre-Dame es gemela de la Virgen de la Abadía de San Benito sobre el Loira…
La Catedral ofrece para los amantes del esoterismos todos los alicientes que la hacen uno de los sitios más especiales del mundo. Es por éso quizás los caminantes y orantes que se mueven entre su nave central y llegan hasta la cabecera; hay quien dice que es un camino iniciático.. algo tiene y se nota cuando se está dentro de ella y poco a poco seguimos a los penitentes hasta el altar mayor.
Para terminar la visita es bueno que consultemos los días que el famoso Organo de Parisot de un concierto; es ejemplar único que data de 1743 y tiene una sonoridad totalmente adecuada a las dimensiones del templo y es sorprendente confirmar que se puede escuchar nitidamente desde todos los ángulos del templo y desde todas las distancias. Su sonido es espectacular y está considerado como uno de los mejores del mundo.
Hay que tener en cuenta que el horario de los templos es muy distinto al español, por lo cual hay que considerar que hay menos posibilidad de acceder al templo salvo que sea en horario de ceremonias o misas.
DAMADENEGRO 28/3/2009
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