Una de las cosas que no quería perderme por nada del mundo era la noche Berlinesa, ¡¡los Berlineses son los reyes del techno!!
Sin embargo yo no soy muy fan de este estilo de música, y hablando con mi amigo Miguel que estuvo en Berlin unos meses antes que yo, se me fueron todavía más las ganas: para entrar a las discotecas, hay que hacer varias horas de cola y en muchas por ser extranjero no te dejan entrar.
Además como viajábamos de mochileros, logicamente yo no me traía los tacones, asi que pensamos en renunciar a la idea.
Dándole vueltas al asunto se me ocurrió preguntarle a la recepcionista del hotel ya que tenía el pelo violeta y dilataciones en las orejas y logicamente podria echarme una mano.
Le dije que ya que estaba en Berlin, tenía ganas de hacer algo diferente, me sonrió y me dio una dirección y me dijo: “solo tienes que llevar una pieza de cuero“.
Tardé como 10 segundos en procesar la informacion:
Berlin, fiesta, cuero…. juaaaassssssssss
Asi que le dije que buscaba algo menos raro pero alternativo. Entonces me dio la dirección de un pub gótico.
No le dije nada a Mathieu, por casualidad iba vestido de negro, asi que le propuse acompañarme a una “discoteca” y punto. (No fue mentir, sino omitir información).
Al bajarnos en la parada de metro, no tenía ni idea de por donde ir pero, vi una chica vestida como un vampiro y me dije que ella también iría a esa fiesta, así que nos pusimos a seguirla.
20 minutos después Mathieu estaba de los nervios: “¿pero te imaginas que esa chica va a su casa?¿¿ y la llevamos siguiendo todo este tiempo??”
Lo peor fue cuando se metió por un descampado, ahi Mathieu ya se cagó entero, pero es que teneis que poneros en situación: una de la mañana siguiendo a un vampiro por un descampado en Berlin
Pero finalmente encontramos el pub, el K17
En estas cosas los Berlineses se lo curran guay, el sitio era un edificio ¿abandonado? de 4 plantas, cada una con un estilo de música diferente.
La primera planta era Rock, nada muy fuerte ni extraño, mismo ambiente que os encontrariais en O Jato Negro en Ourense o en cualquier garito metalero español. Pero en grande
La otra sala, era de metal, del duro, industrial, black…. estuvimos un rato bailando dándolo todo. Luego llegamos a la sala Dark Wave <3 vuelta a mis 17 años, con Cinema Strange.
Sin embargo la sala más grande , oscura y rara era la dedicada al Industrial Gotico. A saco. Gente con crestas, pelos de colores, rastas, chicos con faldas, cuero y latex bailando a lo loco Combi Christ y toda la tralla por el estilo. Si para mi fue un choque, no os podeis imaginar la cara de Mathieu
Por muy raro que os parezca, nos lo pasamos taaaaaaaan bien que fue sin duda la mejor noche del 2015.
Y para terminar, una de las visitas que casi nos perdemos (no creíamos que fuera interesante) y que recomiendo ENCARECIDAMENTE si vais a Berlin es : Berliner Unterwelten, visitar el subsuelo de Berlin donde están los bunkers nazis.
Hay varias visitas diferentes, y muchísimos horarios en español. En el interior no se pueden tomar fotos, así que las que aquí veis son sacadas de su web.
http://berliner-unterwelten.de
Desde luego si llegamos a saber que era tan interesante hubieramos hecho más de una visita.
Y esta ha sido mi breve pero pintoresca experiencia en la capital alemana :)