Ally McBeal
Para mi todo comienza con Ally. Con un estilo muy de los 90, es la más antigua de todas las que presento.
Sinopsis: Ally McBeal es una joven independiente pero insegura, inteligente pero neurótica, una romántica y soñadora abogada que por por puro azar empieza a trabajar en un bufete de abogados, donde también trabaja Billy, un ex-novio al que nunca olvidó. El problema es que Billy ya está casado, y, además, su esposa también trabaja en el despacho, un singular bufete donde todos comparten un baño unisex. (FILMAFFINITY)
Aún siendo machista para la época que vivimos hoy en día en algunos de sus guiones, también se vislumbra cierto tono feminista y reivindicativo. Hay que tener en cuenta que tiene más de 20 años. Un mix entre drama y comedia, mis escenas favoritas son las representaciones que hacen de lo que Ally piensa en cada momento. Muy surrealistas y en general, graciosas.
Para mi, merece la pena verla. Sobretodo porque las siguientes dejan atrás el tono cómico para presentarse como más serias y “realistas”. Y tal vez echo de menos este absurdo tan grande que es la propia Ally.
+1 Scandal
Pongo +1 a Scandal, porque es una añadida. No es una serie de abogados al uso, porque la protagonista no se dedica a litigar contra nadie. Pero tampoco se puede decir que esté lejos de lo que algunos abogados hacen en su trabajo: limpiar los trapos sucios lo más discretamente posible.
También la incluyo porque creo que Scandal supuso un antes y un después para mi: acercó el lado oscuro del mundo “judicial”, y añadió un plus: la política. Esto igual no lo entiendes ahora, pero te acerca un poco más a The Good Wife.
Sinopsis: El trabajo de Olivia, en Washington, consiste en manejar y desactivar crisis y escándalos que puedan perjudicar la imagen y la vida de sus clientes, miembros de las élites del país, entre los cuales está el mismísimo presidente de los Estados Unidos. (FILMAFFINITY)
Hay que verla, más que por su valor como serie, porque ayuda a entender muchísimo mejor The Good Wife. Y ya.
¡Qué no! La serie está bien. Yo personalmente la abandoné cruelmente, pero porque encontré algo que me llenó más. Le pasó lo que a todas, que llega un punto en que empiezan a zarandearse para mantenerse en pie. Y para mi cayó.
The Good Wife
Pues ya hemos llegado al quid de la cuestión. Un drama judicial y político que hace una mezcla tan potente como adictiva. Personajes mucho más carismáticos, lejos del tono oscuro en la pantalla, sí que hay cierta oscuridad en los propios personajes, en sus maneras, en sus pensamientos.
Sinopsis: Peter es un popular político que acaba en la cárcel por malversación de fondos y escándalo sexual. A partir de entonces, la vida de Alicia Florrick (Julianna Margulies), su esposa durante 13 años, se desmorona. Deberá rehacer su vida, tras sufrir la humillación de comparecer en público a su lado. Para ello, reanuda su trabajo de abogada en un prestigioso bufete, sin descuidar por ello la vida familiar. De hecho, procurará por todos los medios que sus hijos adolescentes se mantengan al margen del escándalo. La serie se inspira en un caso real: el del Gobernador de Nueva York Eliot Spitzer, que perdió su cargo por un escándalo sexual con una prostituta de lujo. (FILMAFFINITY)
Con una base sólida sobre la que mantenerse, vamos viendo la evolución del personaje principal, Alicia Florrick, disfrutamos de casos intrigantes y también nos enamoramos de los que la acompañan en ese camino. Gracias a ese amor surge The Good Fight (que ya he mencionado antes).
Yo de esta serie me llevo sus personajes (mención especial a Marissa Gold y Elsbeth Tascioni), que curiosamente tiene unos secundarios brutales, su historia y sus casos. Voy a volver a verla más pronto que tarde.
The Good Fight
Obviamente, después de The Good Wife había que hablar de The Good Fight. No solo es su spin-off, es casi una extensión de la misma. Guarda tan bien el estilo y la forma, que a veces no tengo claro si he cambiado de serie o no. La única diferencia relevante es que Alicia ya no está. Esto es algo que ha encantado a mucha gente, porque como ya dije antes, la gracia no era la prota, eran sus personajes (también porque muchos la odiaban… ). En esta serie, sigo pensando que no hay protagonistas que eclipsen el conjunto, la verdad.
Sinopsis: El spin-off de la aclamada serie The Good Wife se centra en los personajes de Diane Lockhart y Lucca Quinn, un año después de los sucesos del último episodio de su predecesora. (FILMAFFINITY)
Creo que la sinopsis se queda corta. ¿Dónde queda el tema político? Una incredulidad gigante frente a la investidura de Trump es lo que comienza la serie y lo que la mantiene en alza. ¿Ya no hay casos? Pues resulta que sí, y tocan temas muy controvertidos y actuales. Esto último, de hecho, es una de las cosas que más me gustan como fan.
He elegido la foto de promo con todos los personajes de la primera temporada porque creo que engloba mucho mejor el significado que yo le encuentro a la serie, que es que no hay tres protagonistas como tal. Todos lo son en mayor o menor medida, aunque siempre haya una voz cantante (que en este caso creo que es Diane Lockhart). Y algunos, van haciéndose a un lado en favor de otros. Y eso es lo bonito.
*También es bonito pensar en Christine Baranski actuando en el Grinch
Suits
Cambiamos de tercio, pero no de género. La cosa sigue siendo el Derecho en Suits, pero más unido al mundo económico que al político. Tiene un no sé qué que engancha. Tal vez sus protagonistas y su estrecha, complicada y abrumadora relación. O tal vez el entramado de relaciones sentimentales que se cruzan en los casos. No lo tengo claro.
Sinopsis: Michael Ross se gana la vida bordeando los límites de la legalidad. Es un joven muy inteligente, pero las malas compañías de la universidad lo llevaron a creer que para triunfar en la vida hay que saltarse las reglas. Así, por ejemplo, vive de presentarse en nombre de otros a los exámenes de Derecho. Por azar conoce a Harvey Specter, uno de los abogados más jóvenes y brillantes de Manhattan. La inteligencia y las dotes de Michael lo deslumbrarán tanto que lo contrata a pesar de que aún no ha terminado la carrera. (FILMAFFINITY)
Pasa un poco como con Scandal. Esta serie te engancha muy rápido, pero también hace equilibrios por mantenerse en pie una vez la trama principal pierde fuelle. Y eso es lo que puede hacer que pierdas la pista de la serie. Lo bueno es que tienes en Netflix seis temporadas enteras, y el comienzo de la séptima. Casos interesantes y buena tensión de fondo, tanto en lo judicial como en lo sentimental. Secundarios que algún día tendrán su propia serie. Buen remix.
Cómo defender a un asesino
He dejado para el final lo intenso. Esta serie no solo va de abogados, también de asesinatos, y no necesariamente los cometen a quienes representan los protagonistas. Esto es clave para entender que cuando empieces esta serie, no vas a ver casos sin más, sino que vas a seguir una historia que por encima, cual distracción, lleva algunos casos.
Sinopsis: Trata sobre un grupo de ambiciosos estudiantes de Derecho y su brillante y misteriosa profesora de defensa criminal. Estos jóvenes se verán envueltos en un complot de asesinato que cambiará el curso de sus vidas. (FILMAFFINITY)
Tiene mucha intriga, es oscura y profunda en algunos momentos. La forma de contarla es curiosa, pero sobretodo es tensa. Cuanto más te metes más rápido va todo. Y esa es un poquito su esencia.
En este caso, es su protagonista, Viola Davis, quién lleva el peso de la serie a sus espaldas. La verdad es que interpreta un personaje brutalmente roto. Eso tapa un poco las carencias de guión que tiene la serie y hace bueno algo que podría ser mediocre.
Damages
Uf. No sé como presentarla. Es una serie que mezcla el derecho con la violencia, el estatus social, la intriga, y el poder. Y es una p*** maravilla.
Sinopsis: Es de carácter judicial y está ambientada en Nueva York. Patty Hewes (Glenn Close) es una famosa e implacable abogada, experta en litigios contra dirigentes de grandes compañías. Ellen Parsons (Rose Byrne) es su joven y brillante protegida. En un importante juicio se enfrentan a Arthur Frobisher (Ted Danson), uno de los más ricos y poderosos empresarios del país. Mientras Patty libra una dura batalla contra Frobisher y su abogado, Ellen se dedica a aprender los entresijos de la profesión. (FILMAFFINITY)
Maravillosa forma de contar la historia empezando por el final. Gran maestría hilando finamente las pistas. Un misterio, que yo personalmente, tardé mucho en comprender. Y eso puede que fuera lo que más me gustó. No era una dirección errática, ya sabías como terminaba, todo tenia sentido, pero era complicado encontrárselo.
Me da pena tener que decir que la abandoné, porque creo que cometieron un error al continuarla después de la primera temporada. La segunda intentó mantener el tipo e incluso lo consiguió. La tercera ya empezaba a resultar pesada, por repetitiva. La cuarta no la he visto.
Después de esto, te recomendaré que veas la primera temporada, porque es brutal. Personajes duros y fuertes, que se enfrentan entre ellos en una lucha de poder a muerte. Los ves crecer con cada episodio y tu intriga crece con ellos.