Este vino es de la D.O. Conca de Barberà (Tarragona), hasta la semana pasada, para mí completamente desconocida. Por eso lo quisimos probar...Nada más olerlo noté que era diferente a lo que mi cerebro tenía reconocido como "olor de vino joven típico". Últimamente he consumido vinos jóvenes de la misma zona (o similares) y esto se notó, porque de repente me dí cuenta que quizá había estado muy encerrada en una denominación de origen o en una uva, cuando el abanico de posibilidades que te ofrece el mundo del vino es infinito. Rápidamente identifiqué el olor de tierra mojada, pero os digo que me costó identificar al principio los aromas que desprendía con algo conocido. Me descolocó en cierta manera.
El sabor no decepcionó, estaba bueno y casi nos acabamos la botella (con esto lo digo todo, ¿no?). Es un vino suave y sedoso, pero con un toque fresco. Algo diferente que ayuda a abrir los ojos y a seguir probando vinos nuevos. Su precio ronda los 11 â?¬ aunque desconozco si lo podéis encontrar en Castellón...habrá que investigar. :)
Nosotros lo probamos en Lola Tapes, Platillos & Gins, un restaurante que os recomiendo, que se encuentra en la plaza del ayuntamiento de Tarragona y que os descubrí el lunes pasado en mi artículo semanal para la revista Flordselva.
¡Buen finde y buenos vinos!