Desde hace años, en el equipo nos venimos quejando de la escasez de ideas que está azotando la industria del cine en la que, desde bastante antes de la pandemia, proliferaban en exceso las producciones de secuelas y precuelas de cualquier película que hubiese tenido éxito comercial o gracias a Disney y su entramado de empresas, las salas de cine parecían y parecen, copadas por un sinfín de los más variopintos superhéroes.
En la televisión, y plataformas de streaming, esto parecía algo más remoto, aunque desde hace unos años, las temporadas de las series más exitosas se van sucediendo, aunque estén ya más que agotadas (por ejemplo: “Élite”, “Anatomía de Grey”, “The walking dead”, etc.).
Entre las que aguantan menos en catálogo, acostumbran a ser las ideas nuevas, o adaptaciones de casi cualquier cosa que haya tenido éxito comercial (libros, comics, novelas, etc.), pero ¿y porque decimos de casi cualquier cosa? Pues, porque hasta hace poco, había un sector que no conseguía dar el salto con éxito ni a la pequeña ni a la gran pantalla, la adaptación de un videojuego.
En plena pandemia, un viejo videojuego (bueno, quizá no tan viejo ya que, se lanzó en 2013) gozó de una segunda juventud unos meses antes de que se presentara su segunda parte, os estamos hablando de “The last of us”.
“The last of us” es un juego diferente al resto, denostado por muchos jugones por la gran cantidad de videos que tiene para contarnos su historia y enlazar las zonas jugables, lo cual, a la vez, le ha dio un tremendo éxito entre la mayoría, incluidos aquellos que no viven para jugar.
Por esa época, se empezó a hablar de la posibilidad de llevar a la pequeña pantalla una adaptación de “The last of us” para aprovechar su convincente historia, y así ha sido, llegando a estrenarse el primer trimestre de 2023.
“The last of us” empieza situándonos en 2003, en una América que debe enfrentarse a un enemigo desconocido, un hongo, el cordyceps, que después de sufrir una mutación se extiende rápidamente entre la población convirtiendo a los infectados en una suerte de zombis violentos. Allí, en esos primeros días de infecciones nos encontramos con Joel (a quien da vida Pedro Pascal) que intenta salvar a su hija Sarah, aunque esta muere en manos de un soldado del ejército.
20 años después, el mundo se ha convertido en un lugar completamente diferente por la devastación que ha causado el virus. Joel se ha convertido en un contrabandista que actúa con su compañera Tess en la zona de exclusión/cuarentena de Boston, controlada por un grupo de FEDRA (una especie de agencia Federal).
En un intento de salir de la zona, Tess y Joel entran en contacto con Marlene, la líder de los luciérnagas (un grupo de resistencia contra el poder FEDRA) quien, tras unos momentos confusos y por su herida, les promete armas y una batería de coche si llevan a la pequeña Ellie (interpretada por Bella Ramsey) hasta su cuartel de Massachusetts. Después de negarse, y muy a regañadientes, Joel acepta el encargo.
Ellie y Joel en lucha contra los infectados
Lo que ya de buenas a primeras parecía una misión suicida muy pronto se complica para el trío ya que, después de un ataque, Tess resulta infectada y Ellie aunque mordida, les descubre que es inmune al virus y que ese es el motivo por el que le tienen que llevar a la sede de los luciérnagas.
Durante el camino, Joel y Ellie deben ir sorteando varios peligros, cruzándose con infectados, con chasqueadores e incluso con un gordinflón (cada uno de ellos más peligroso que el anterior) y por si fuera poco, con cazadores, los propios miembros de FEDRA e incluso con caníbales, y todos con ganas de acabar con nuestros protagonistas.
En su camino, de Boston a Wyoming cruzando Estados Unidos de punta apunta, Joel y Ellie buscarán y encontrarán el soporte de viejos amigos y familiares, el primero de ellos, en Lincoln donde encontraran a Bill y Frank (contándonos toda su historia), o en Jackson donde Joel se reencontrará con su hermano Tommy después de 20 años.
Como ya os podéis imaginar, al final llegan a Wyoming, pero nos quedaremos para nosotros lo que pasa finalmente entre Joel, Bella y los luciérnagas.
Técnicamente os diremos que “The last of us” es una serie excelente, aunque, para nosotros, y ya lo sentimos, no es una serie excepcional. Argumentalmente, podríamos decir que se trata de una serie basada en el videojuego ya que, son muchos los momentos en los que la serie se separa de la línea del juego, añadiendo momentos inexistentes (como por ejemplo, el maravilloso capítulo dedicado a la vida de Bill y Frank) y suavizando muchos otros en los que la violencia del videojuego hubiesen sido inapropiados en la serie.
Uno de los puntos fuertes de “The last of us” está en el apartado de la producción, donde la ambientación brilla como el que más para desplazarnos al mundo hostil en que se ha convertido tras la hecatombe del cordyceps, donde vemos unos Estados Unidos abandonados, devastados, con la vegetación recuperando el espacio robado por las grandes ciudades.
Ellie y Joel en pleno viaje
Interpretativamente hablando nos quitamos el sombrero ante la fantástica elección del dúo protagonista ya que, tanto Pedro Pascal dando vida a Joel como Bella Ramsey interpretando a Ellie están realmente fantásticos. Por un lado nos encontramos con Pascal dando vida a un hombre duro, hostil y cerrado al mundo que no consigue, de entrada, vencer su pasado, y por el otro lado tenemos a Ramsey fusionándose y dando vida a un personaje que crece, como persona y en dureza, con el avance de los capítulos, en los que deja atrás su inocencia para convertirse en una luchadora nata. Ambos brillantes.
Por todo lo que os hemos contado, y esperando que no se estire esta serie como si fuera un chicle, nuestra nota final para “The last of us” es de un 8.5 sobre 10.
Título original: “The last of us” – Estados Unidos
Género: Drama, Terror, Thriller
Año de creación: 2023
Año de finalización: 2023 (primera temporada)
Capítulos: 9 (de unos 50 minutos cada uno)