Por todos es conocido que, una de las grandes alternativas que tiene la industria del cine para llenar sus arcas, es aprovechar las historias originales que han tenido un gran éxito en nuestras salas para crear secuelas y más secuelas (o precuelas si les acaban las ideas) de las mismas. Tenemos grandísimos ejemplos en Disney Company (y por extensión, Marvel, LucasFilm, etc.) quienes raramente nos sorprenden con algún original.
Normalmente, las secuelas se cuentan por años (a raíz de una por año, o cada dos años en algunos casos). Con todo, hay casos raros en los que, de entrada, se descarta hacer una secuela y años después, se recupera esa idea. Uno de estos casos lo encontramos en “Jumanji” de 1995 con el malogrado Robin Williams como interprete principal.
Pues bien, cuando ya nadie lo esperaba, 22 años después del estreno de “Jumanji”, llegó a nuestras salas su secuela, “Jumanji: Bienvenidos a la Jungla” con un casting y una historia totalmente diferente a la original, y hoy nosotros os lo contamos en este pequeño rincón.
La historia de “Jumanji: Bienvenidos a la Jungla” empieza cronológicamente un año después del final de la original con un hombre encontrando, semienterrado en la playa, el juego de Jumanji. Este hombre se lo lleva a su hijo Alex, quien, de entrada, lo descarta ya que prefiere jugar a videojuegos. Por la noche Jumanji se convierte en un videojuego y acaba absorbiendo a Alex.
20 años después de la desaparición de Alex, cuatro alumnos del instituto son castigados a limpiar el sótano del mismo. Los alumnos son Spencer (el típico empollón), Fridge (un jugador de futbol americano), Martha (una chica tímida) y Bethany (una chica pija adicta al móvil) y aunque entre ellos poco tienen que ver, y muy a regañadientes, aceptan jugar con el extraño juego que acaban de encontrar entre las cajas del sótano. El juego es “Jumanji” y como no podía ser de otra manera, a los pocos minutos hace de las suyas y absorbe a los cuatro jóvenes.
Una vez dentro de juego, descubren que Jumanji les ha jugado alguna que otra mala pasada, la primera de ellas es que sus personajes en el juego no acaban de adaptarse a los suyos en la vida real ya que, tenemos: el empollón Spencer se convierte en el Dr. Bravestone (a quien da vida Dwayne Johnson), Fridge se convierte en el bajito zoólogo “Mouse” (Kevin Hart), la tímida Martha es en el juego Ruby (Karen Gilian) una experta en artes marciales y la pija Bethany es el profesor “Shelly” (Jack Black) un obeso cartógrafo. La segunda gran sorpresa, es que, tienen vidas limitadas y si las pierden todas, no volverán a su realidad.
Mouse, Ruby, Shelly y el Dr. Bravestone
Poco después de su llegada a la jungla, los cuatro se encuentran con Nigel, un jugador propio del juego que les cuenta todos los detalles de sus personajes y el objetivo que tienen en el juego, recuperar “El Ojo del Jaguar”, la joya que Van Pelt, el cazador de la primera parte de la película, ha robado. Solo así podrán ganar la partida y abandonar el juego.
A partir de este punto, y en base a un mapa que poco a poco les va mostrando el territorio, nuestros amigos inician su aventura, llevándoles en primera instancia a un mercado en el que tendrán el primer encuentro con Van Pelt y con su ejército, cosa que sucede justo después de encontrarse con el quinto jugador del juego, el piloto SeaPlane (Nick Jonas), quien resulta ser Álex, el jugador que 20 años atrás entró en el juego y del que todavía no ha podido salir.
Después de una más que accidentada visita al mercado, los cinco jugadores consiguen hacerse con el trozo de plano que les falta y, de pasada, con la joya que escondía Van Pelt lo cual les supone que tengan que iniciar una huida por la jungla con un ejército de sicarios persiguiéndoles.
Camino de su nueva aventura SeaPlane le cuenta al grupo como perdió sus dos vidas previas y que, siente un miedo atroz a enfrentarse de nuevo a la misma prueba. A partir de ahí, conseguir un helicóptero, huir de manadas de rinocerontes blancos, cambios de relaciones entre ellos y un sinfín de aventuras que, obviamente no os desglosaremos aquí. Lo que sí haremos es, contaros nuestra opinión sobre “Jumanji: Bienvenidos a la Jungla”.
Éramos muchos los que decíamos que la “Jumanji” original no necesitaba una secuela y mucho menos cuando su alma mater, Robin Williams nos abandonó, pero no os negaremos que esta secuela, “Bienvenidos a la Jungla” ha sido una auténtica sorpresa ya que ha conseguido algo realmente especial, rejuvenecer el clásico convirtiéndolo en una comedia de acción que, aunque ha perdido magia, ha dejado atrás los toques más oscuros de la original para convertirse en una película para todos los públicos.
Argumentalmente nos gustaría remarcar el buen ritmo narrativo de “Jumanji: Bienvenidos a la Jungla”, combinando toques de las típicas comedias juveniles con el ritmo de las roadmovie, sin olvidar los constantes gags que van desde la auto burla de los armarios de gimnasio (hechos por el propio Dwayne Johnson) hasta el toque gay, con erección incluida de Jack Black con Nick Jonas.
Desde el punto de vista interpretativo tenemos realmente muy poco a aportar ya que, aunque tanto Jack Black como sobre todo Dwayne Johnson están realmente bien, ninguno de los dos está memorable, están simplemente convincentes dando vida a unos personajes entretenidos, cosa que no consigue, por ejemplo, la estrellita Nick Jonas.
Con todo, no os engañaremos, “Jumanji: Bienvenidos a la Jungla” es una película muy entretenida con la que es casi imposible que las casi dos horas de metraje no os pasen en un abrir y cerrar de ojos. Por todo lo que os hemos contado, nuestra nota final para “Jumanji: Bienvenidos a la Jungla” es de un 7 sobre 10.
Título original: “Jumanji: Welcome to the Jungle” – 2017 – USA
Dirigida por: Jake Kasdan
Duración: 119 minutos
Género: Acción, Aventuras, Comedia, Fantástico