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Si estáis planificando un viaje por Cinque Terre, reconocido por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad, o simplemente tenéis ganas de inspiraros para vuestras próximas vacaciones, no podéis perderos este recorrido por las provincias italianas de Piamonte y Liguria.
1. Turín
Es una de las grandes incomprendidas del país. Turín no tiene las cifras de turistas con las que cuentan Roma, Venecia o Florencia. Sin embargo, fue una de las sorpresas más impresionantes de nuestra ruta. Una de las ciudades más bellas del norte de Italia. Turín es lo suficientemente pequeña para recorrer sus calles cómodamente a pie, y descubrir un paraíso desconocido.
2. Génova
Una parada imprescindible en el viaje por Liguria. Aunque lo más conocido de la ciudad italiana es su famosa catedral románica. La catedral es visitable y además se puede ascender por la Torre hasta una terraza que nos deja una espectacular vista de la ciudad; pero Génova va mucho más allá.En nuestra visita descubrimos el puerto, el faro, la casa natal de Cristóbal Colón, y sobre todo, sus tiendas gourmet, en las que se puede adquirir el auténtico pesto genovés.
3. Rapallo
En nuestro caso, escogimos Rapallo como base del viaje por el Cinque Terre. Nuestra intención era hacer todo el recorrido a pie, conociendo los senderos que unen estos famosos pueblos italianos.Rapallo, además de servirnos de base de viaje, nos permitió descubrir un lugar único y lleno de encanto. No dejéis de visitar su pequeño castillo, ubicado en la orilla del mar, su paseo marítimo que recuerda a la costa azul francesa, o el santuario de Nostra Signora di Montallegro, que es una visita ideal para aquellos que quieran realizar un poco de actividad física.
4. Monterosso al Mare
Nuestra ruta por el Cinque Terre comenzó en Monterosso, adonde llegamos en tren. Salimos bien temprano, para comenzar con la ruta.
Nos acercamos al pueblo, recorrimos sus calles aún dormidas debido a lo temprano que era, y tras deleitarnos con el paisaje idílico que se contempla desde su playa, donde los pescadores dejan sus barcas tradicionales colocadas, nos dispusimos a comenzar el trekking.
Tras un café rápido, y con ayuda de la web https://www.cinqueterrehike.com/es/sendero-azul-vernazza-monterosso donde se muestran todos los senderos disponibles en Cinque Terre, y el estado en que se encuentran en el momento de la visita, comenzamos nuestro recorrido para llegar de Monterosso a Vernazza.
Hemos de recordar que el sendero es exigente, y para realizar la ruta hay que encontrarse en buena condición física, aunque el sendero está bien delimitado, y es fácil seguirlo, al inicio de la ruta nos encontramos con una escalera con más de quinientos escalones, si habéis leído bien, ¡quinientos! Por eso recomendamos no realizar esta ruta si no se está en condiciones físicas aceptables.
Y aunque el inicio fue duro, hemos de reconocer que las vistas son absolutamente increíbles, y que mereció la pena recorrer cada metro. Tardamos una hora y media, más o menos,y poco antes de llegar a nuestro destino, Vernazza, nos encontramos con uno de los mejores puntos en los que obtener una preciosa panorámica de Vernazza.
5. Vernazza
Ya en Vernazza, y cansados por el esfuerzo, paramos en una pintoresca cafetería, y tras reponer fuerzas, nos dedicamos a visitar las estrechas y empinadas calles del famoso pueblo. Hemos de decir que es uno de los pueblos más bonitos de todo el Cinque Terre, y que aunque no vayáis caminando, podéis parar en tren, o llegar en coche.Y tras un buen rato recorriendo el lugar, nos encaminamos hacia Corniglia, nuestra siguiente parada en el viaje.
6. Corniglia
El camino entre Vernazza y Corniglia nos resultó más fácil que el anterior, pero igualmente exigente, por lo que recomendamos que evaluéis vuestras fuerzas antes de emprender la ruta.
Nada más comenzar la ruta, y tras una pronunciada subida, encontramos un precioso mirador en el que hacer fotos, y obtener una vista panorámica del pueblo de Vernazza, un lugar único, sin duda.
Y tras hora y media, más o menos como en el caso anterior, comenzamos a vislumbrar la forma de Corniglia. Corniglia es un pueblo pintoresco, y aunque a veces se excluye de las rutas por el Cinque Terre por no tener acceso directo al mar, nuestra recomendación es que lo visitéis, es increíble. Tan solo la visita al Oratorio del Disciplinati di Santa Caterina, merece la pena, por no hablar de su gastronomía, que pudimos disfrutar, ya que aprovechando que era la hora de comer, paramos en un restaurante local, con terraza, y comimos con unas impresionantes vistas al mar.
7. Manarola
Para el día siguiente, nos quedaron Manarola y Riomaggiore. Aunque, además nos cambiábamos de hotel, ya que Rapallo ya nos quedaba bastante lejos para los planes del día; así que nos levantamos temprano, desayunamos, y salimos desde la estación de tren de Rapallo en dirección a La Spezia, donde pretendíamos dejar nuestras maletas. Al llegar, descubrimos que en la estación de tren de La Spezia no hay consigna, por lo que tuvimos que utilizar un servicio de depósito de maletas llamado Nannybag, que nos permitió dejar las mochilas en una tienda cercana y recogerlas al regresar por la tarde.Como ya habíamos perdido una cantidad de tiempo considerable, en esta ocasión nos desplazamos en tren hasta Manarola, donde disfrutamos visitando el pueblo, y conociendo sus callejuelas, y luego partimos hacia Riomaggiore también a pie, como el día anterior.
El sendero azul que actualmente une Corniglia con Manarola se encuentra cerrado, por lo que si quisierais ir a pie entre los dos pueblos tendríais que optar por la ruta larga de casi tres horas.
Con respecto a Manarola, lo único que podemos decir, es que no podéis perdéroslo, es un pueblo precioso, y la visita merece la pena, ya que sus pintorescas casas de fachadas de colores, y las aguas cristalinas que bañan su tierra, os darán la bienvenida.
8. Riomaggiore
Después de Manarola, nos aventuramos con Riomaggiore.Nuestra intención inicial, al planificar el viaje, era recorrer el famoso camino Via del Amore. Desafortunadamente, no pudimos hacerlo ya que estaba también cerrado (actualmente sigue cerrado, se abrirá previsiblemente en mayo de 2024).
Tomamos un sendero más largo, que es el que va de Manarola a Riomaggiore, vía Beccara, y que nos pareció el más difícil de todos, ya que en algunos puntos del camino tuvimos que ayudarnos a subir con las manos. Nuevamente, si requiere buena condición física para completar este camino.
Tardamos más o menos una hora, y tras un largo descenso con multitud de escalones, llegamos a nuestro destino. Eso si, os advertimos de que el sendero os deja en la parte baja de Riomaggiore, y si queréis conocerlo y visitar su famoso castillo, tendréis que subir multitud de escalones.
El pueblo, aunque pequeño, tiene mucho encanto y cuenta con un museo de la memoria, un pequeño templo que es recomendable visitar, y una pequeña playa ideal para los calurosos días de verano.
En nuestro caso, como habíamos madrugado y llegamos pronto a Riomaggiore, decidimos despedirnos de estos bellos parajes, y partir en dirección a La Spezia para comer. Eso si, junto a la estación de tren encontramos una curiosa tienda de souvenirs del Cinque Terre, donde compramos varias postales, y un librito con recetas típicas de la zona.
9. La Spezia
Y tras nuestra dura mañana, y cansados de las largas caminatas, llegamos a nuestro destino final del día, recogimos las maletas de nuestra particular consigna, y pusimos rumbo al hotel.Por la tarde, callejeamos por allí, y pudimos visitar el Castello San Giorgio, el punto más elevado de la ciudad (aunque actualmente hay un ascensor que te lleva fácilmente), su mercado de la fruta, y los preciosos jardines públicos que nos llevaron hasta el puerto.
Os recomendamos pasear sin rumbo, entrar en sus tiendas, y disfrutar de su esencia, ya que La Spezia es una ciudad muy particular.
Esperamos que os haya gustado nuestra escapada italiana, y si estáis planificando un viaje a Cinque Terre, no dejéis de echar un vistazo a nuestro itinerario.
Si os ha gustado este itinerario podéis descargaros un pdf con los detalles: Ruta por Italia, con Chinque Terre*.
*Descarga de responsabilidad: el itinerario se presenta sólo con fines ilustrativos, Viajar sin imprevistos no se responsabiliza de la disponibilidad de los transportes, rutas y locales de restauración descritos en el itinerario presentado.