Acompañarnos en este post para descubrir más sobre esta preciosa ciudad y sus alrededores.
1. Vigo
Aparcamos en el parking del centro comercial A Laxe, cerca del puerto deportivo, la primera hora es gratuita y además si tomas algo en alguno de sus bares o haces alguna compra, suelen darte descuentos de tiempo en el parking.
Paseamos por su puerto y descubrimos la famosa estatua dedicada a Julio Verne obra del escultor José Morales, que como muchos sabréis el escritor dedicó uno de sus capítulos de 1000 leguas de viaje submarino a la Bahía de Vigo.
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Subimos hacia el Mercado de las Piedras, y su famosa calle por servir las ostras más frescas de toda la costa gallega. Si continuamos nuestro camino llegamos a la Concatedral de Santa María de Vigo, de una mezcla de estilos, de torres barrocas y neoclásico. Piérdete por las calles de su casco antiguo o Casco Vello.
Recorriendo sus calles del casco antiguo, llegamos a la Plaza de la Constitución con sus terrazas repletas de vida.
Llegamos a la Puerta del Sol, punto de encuentro de muchísimos vigueses con su emblemático Sireno que se ha convertido en un emblema de la ciudad, aunque a muchos les encanta a otros tantos no demasiado, lo dejamos a vuestro criterio personal.
Muy cerca del Sireno está el Dinoseto, también con muchas opiniones al respecto.
Si vuestra pasión son las vistas de infarto, será visita obligada, el Castillo de San Sebastián del cual se conserva la muralla exterior y varias torres de vigilancia, ahora convertido en un parque en pleno centro de la ciudad.
Otras de las mejores panorámicas de la ciudad las disfrutarás desde el Monte O Castro con sus ruinas del Castelo do Castro construido estratégicamente en el punto más alto de la ciudad para la defensa de la misma. Nosotros cuando fuimos estaban reformando el parque y las zonas de paso.
Según muchos ciudadanos de Vigo, debes beber de la Fuente de las Dos Manos, da buena suerte.
Si te apetece un descansito de tanto patear la ciudad, visita los preciosos Jardines del Palacio de Quiñones de León, totalmente gratuitos y transmiten mucha paz.
Si lo que quieres es refrescarte, la Playa de Samil es una de las playas urbanas más espectaculares y limpias de toda España y cuenta con bandera azul.
Piérdete por el Barrio de Bouzas, uno de los barrios marineros con más encanto del norte de España, te traslada al pasado por completo.
¿Sabíais que a Vigo se la otorga el sobrenombre de la Pequeña París? Y esto es por edificios muy característicos y modernistas que nos recuerdan a los edificios parisinos tales como el Simeón.Una de las mejores maneras de conocer una ciudad de manos de guías locales son los Free tour, además de completar la experiencia en la ciudad conoces su historia y datos que a simple vista por tu cuenta no siempre tienes la oportunidad de conocer. A nosotros por ejemplo, nos encantan los free tour temáticos como los de misterios y leyendas de una ciudad.
Vigo es una ciudad muy fácil de recorrer y visitar a pie en un solo día, si tienes aun tiempo en tu visita te recomendamos esta original y poco común excursión a la Isla de San Simón, es un enclave único y bien turístico cultural para Galicia que te transporta a historias del Franquismo y de piratas.
2. Baiona
En la ruta conociendo Vigo nos sorprendió este precioso pueblo costero.De visita imprescindible es el Castillo de Monterreal, actualmente Parador de Turismo. La entrada si no estás alojado allí tiene un coste y tienes que caminar desde dónde puedes dejar el coche. No obstante, si preferís una foto panorámica, lo mejor es dejar el coche en el puerto y desde las afueras del mismo hacer una foto que enmarque este bonito recuerdo.
Visita su casco antiguo a pie, y piérdete por sus calles empedradas.
¿Sabías que Baiona fue el primer puerto de España que supo del descubrimiento de América? El 1 de Marzo de 1493, la Pinta llego a sus aguas con la noticia.
3. La Guardia y Santa Tecla (Santa Tegra)
En nuestra visita a Vigo también pudimos disfrutar del pueblo pesquero de La Guardia y sus mágicos colores. Pasea por su casco antiguo y disfruta de su actividad pesquera diaria.
Para comer, os aconsejamos el A Trasmallo, espectaculares arroces, sobretodo el de bogavante y mariscada. Los postres, increíbles.
De inicio subimos al Monte de Santa Tecla en coche, únicamente tenemos que pagar 1 euro por persona. Una vez allí subimos a pie al Castro de Santa Tegra donde pudimos contemplar, eso si entre niebla, la desembocadura del río Miño en la costa de Portugal. Os incluye el museo con restos arqueológicos de la zona.
Respecto a su castro prerromano, es uno de los más visitados de Galicia, y es de los mejores conservados.
4. Tui
Comenzamos la visita por su catedral de Santa Maria, una de las sorpresas de Tui y por lo que la hacen unos de los pueblos más bonitos del norte. Es de estilo románico y gótico.
Continuamos con la visita de la Capilla de San Telmo, que para nosotros es una de las capillas más particulares que vimos jamás, no solo por su exterior, si no por su modesto pero bonito interior.
Cruza el Puente Internacional de Tui que atraviesa el río Miño y por el cual se accede a Portugal.
Si lo que más te apetece es una ruta Natural, una ruta por el Monte Aloia es algo muy recomendable y disfrutar de sus vistas y varios miradores a su paso.
Si aun os quedan tiempo y ganas de seguir visitando, os recomendamos esta excursión por la zona del bajo Miño y sus pueblos con mayor encanto en la frontera entre Galicia y Portugal en la cual tendrás también la visita a Tui y la Guardia con subida a Santa Tegra de las cuales ya te hemos hablado. Valença do Minho y Camnha, son otros dos de los puntos de la excursión que merecen la pena visitar.
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Si queréis más información visitad la web de turismo de Vigo.
Fuente: este post proviene de Mundo2travel, donde puedes consultar el contenido original.
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