En una jornada que deparó menos goles que de costumbre, únicamente una diana fue obra de un titular, la de Sofiane Feghouli, para Argelia, que a punto estuvo de causar otra sorpresa en el torneo. No obstante, Bélgica demostró que la generación de la que tanto se habla no era favorita por casualidad, y se ha situado como líder de un grupo en el que rusos y surcoreanos hicieron tablas. Como no podía ser de otro modo, también con goles de reservas.
El otro empate del día no tuvo goles, en gran parte por culpa de la espectacular actuación entre los tres palos de Guillermo Ochoa, que realizó al menos cuatro atajadas importantísimas para frustrar la fiesta brasileña en Fortaleza. Decididamente, México se ha especializado en desbaratar los planes de los pentacampeones del mundo.
Resultados
- Bélgica 2-1 Argelia ? Jugador del Partido Budweiser: Kevin De Bruyne (BEL)
- Brasil 0-0 México ? Jugador del Partido Budweiser: Guillermo Ochoa (MEX)
- Rusia 1-1 República de Corea ? Jugador del Partido Budweiser: Song Heungmin (KOR)
Momentos destacados
Reservas endiablados
Al igual que le había ocurrido el domingo a Suiza, Bélgica recurrió a sus suplentes para imponerse a Argelia. Descontento con el bajo rendimiento de su ataque en el primer periodo, Marc Wilmots dio entrada a Marouane Fellaini y Dries Mertens, y las sustituciones surtieron efecto: fueron precisamente ellos quienes anotaron los tantos de la remontada de los suyos (2-1), consiguiendo así que Bélgica se convirtiese en la octava selección en tener dos reservas decisivos en un mismo partido del Mundial.
Titulares que no tuvieron su día
El resto de la jornada en el Grupo H también tuvo suplentes como protagonistas. Es el caso de Lee Keunho, que entró para marcar el gol de los coreanos, aunque contó con la enorme ayuda de un portero de la categoría de Igor Akinfeev. El jugador del CSKA, figura de su país y embajador de la Copa Mundial de la FIFA 2022, falló de modo estrepitoso, y no ocultó su abatimiento durante el resto del partido. Para él, el discurso de los 23 titulares puede ser una gran amenaza. El otro lado de la moneda es Aleksandr Kerzhakov, que empató tras comenzar en el banquillo. El mismo futbolista que, al igual que su selección, regresaba a un Mundial doce años después de su última participación.
Rivalidad y cordialidad
Los recientes choques han instigado la rivalidad entre brasileños y mexicanos, pero el respeto y la admiración siguen a la orden del día. En el duelo de Fortaleza, las hinchadas marcaron la pauta de lo que se vería en el campo cantando los himnos de sus países con emoción, hasta el punto de provocar las lágrimas de Neymar. Ya con el balón rodando, el capitán brasileño, Thiago Silva, mostró clase al pedir disculpas a Javier ?Chicharito? Hernández tras excederse en una falta, y el guardameta Júlio César sería taxativo al elogiar a su colega de posición: ?Ochoa ha hecho un partido maravilloso. Es el responsable de que el partido haya terminado 0-0?. ¡Cordialidad ante todo!
La muralla
Y no podíamos dejar de mencionar a Ochoa, el héroe mexicano. Curiosamente, antes del Mundial tuvo que pelear por hacerse con el puesto con los otros dos grandes arqueros del equipo, Jesús Corona y Alfredo Talavera. Tras distinguirse en el amistoso contra Portugal y en los entrenamientos, el jugador del Ajaccio ?que no pudo impedir el descenso de su equipo a la segunda división francesa? terminó imponiéndose y se hizo con la titularidad. Resulta difícil que vuelva al banquillo, en el que estuvo durante los dos últimos Mundiales.
Números que hablan
8: desde 1978, cuando empezó su actuación en Argentina con dos empates, Brasil siempre había ganado sus dos primeros partidos en Mundiales. Sin embargo, la serie de ocho torneos seguidos con ese registro llegó a su fin este martes. El empate ha interrumpido también la racha de diez victorias consecutivas de la Seleção, además de acabar con el pleno de victorias de Luiz Felipe Scolari al frente del equipo (suma ahora ocho triunfos en nueve encuentros).
Con información de la FIFA