Basílica de la Santa Cruz
La construcción de esta basílica superó a la de la Iglesia Santa María Novella. Y si bien es cierto que su interior no llama tanto la atención como el de Santa María Novella, su valor artístico es mayor gracias a las piezas de arte de las que hace gala. Se pueden encontrar pinturas de famosos como Donatello, Giotto y Brunelleschi.
plaza santa croce
plaza santa croce
plaza santa croce
La Historia
En 1295 empezaron las obras de la Iglesia de Santa Croce con la dirección de Arnolfo di Cambio sobre la base de una iglesia franciscana mucho más pequeña que fue edificada en los años 1222-1252. En los siglos posteriores, la basílica fue creciendo y embelleciéndose, aunque la fachada permaneció sin terminar. En el siglo XV, la familia Quarantesi financió la fachada con una condición: que se pusiera en el centro el escudo de la familia, pero los monjes se negaron y la fachada estuvo sin terminar hasta finales del siglo XIX, en estilo neogótico. La Basílica di Santa Croce se consagró en 1444. La fachada fue decorada en el tradicional estilo de la época de construcción de la basílica, gótico toscano o gótico florentino, con revestimiento en mármol blanco de Seravezza combinado con mármol verde claro de Prato, verde oscuro (serpentino) de Pisa, rosa de Cintoia y Bolgheri, negro de Asciano y rojo de Egipto. En los frescos que decoran sus paredes trabajaron Giotto y Taddeo Gaddi, entre otros artistas del momento; las esculturas pertenecen a varios artistas, como Donatello y Benedetto da Maiano; también participaron Brunelleschi y Michelozzo en los detalles arquitectónicos.
La construcción de la Capilla Pazzi comenzó en el año 1441 y finalizo en el 1443. La edificación de esta pequeña capilla funeraria se le encargo a Filippo Brunelleschi. El altar de la Capilla Mayor fue obra de Alamanni, quien también diseñó la Fuente de Neptuno de la Piazza della Signoria. En el siglo XVI la iglesia fue remodelada y se agregaron los grandes altares. En el siglo XIX se agregó el campanile de estilo neogótico y se instaló en la plaza el monumento a Dante Alighieri.
En 1966, la fatídica inundación de Florencia provocó graves daños a la iglesia, que se convirtió en el símbolo de las pérdidas artísticas de la ciudad, pero, también, del posterior renacimiento gracias a un minucioso trabajo de restauración.
Con el paso del tiempo se ha ido remodelando y modernizando, adoptando cada vez diferentes funciones y connotaciones. Por ejemplo, de ser una iglesia franciscana, pasó a ser un lugar en donde familias importantes recibían sepultura religiosa, para la época del Renacimiento sirvió como taller artístico, luego fue centro teológico, además llegó a funcionar como panteón de glorias de Italia, y para el siglo XIX se labró una imagen representativa de la reunificación italiana.
El interior
El interior tiene una estructura de cruz egipcia con forma de “T”, con tres naves. La central, grande y solemne, tiene pilares octogonales y arcos ojivales que soportan los muros finos, símbolo de las doctrinas franciscanas. Arnolfo di Cambio, en su proyecto, quería reflejar la sencillez y pobreza de la orden, y por esto realizó la iglesia con una planta desnuda. En la nave central llama la atención el techo con el armazón descubierto. El púlpito octogonal es de Benedetto da Maiano; el tabernáculo de piedra, de Donatello y el altar mayor de Niccolò Gerini.
Las amplias ventanas iluminaban los frescos de las paredes que describían, de una manera directa, la vida de Cristo y de los santos: era la Biblia de los pobres para el pueblo analfabeta.
En la parte posterior de la basílica hay muchas capillas dedicadas a familias burguesas florentinas. Estos edificios conservan los frescos originales de Giotto y de otros maestros del siglo XIV.
Santa Croce, Panteón florentino
Santa Croce es considerada el Panteón florentino, por la cantidad de tumbas y monumentos funerarios que hay en su interior (hasta la fecha se han encontrado casi 300), alberga las sepulturas de muchos artistas famosos, como Miguel Ángel Buonarroti, Galileo Galilei, Maquiavelo, Bruni, Maquiavelo, Lorenzo Ghiberti y Ugo Foscolo. También hay un cenotafio de Dante. El gran poeta, que tuvo que exiliarse, injustamente, en 1301, murió en la ciudad de Ravena, que siempre se ha negado a devolver los restos del poeta a su ciudad natal.
Es muy interesante el sepulcro de Miguel Ángel, en el que, como proyectó Vasari, están las estatuas de la Pintura, la Escultura y la Arquitectura.
Este obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 2.5 España.