Este mágico lugar, se tiñe de blanco cada año con la llegada del invierno, y es que la temperatura media en este período es de entre -10ºC y -15ºC, pudiendo alcanzar hasta los -30ºC. Sus frecuentes nevadas hacen de Laponia un paisaje de ensueño.
Debido a esto, una de sus mayores atracciones turísticas es un recorrido en trineo tirado por haskies o bien por renos, el animal por excelencia de esta área. De hecho, el sami, el idioma hablado en este territorio, tiene cerca de 400 palabras para representar a este animal. Sus habitantes tienen una lengua propia que ha extendido su vocabulario por todo el mundo con palabras como 'tundra'.
Desde allí se pueden hacer excursiones al círculo polar ártico, donde en invierno no sale el sol en ningún momento del día, y en verano no se pone durante las 24 horas. En estas extensiones es común ver las maravillosas auroras boreales.
Otro reclamo turístico es el barco rompehielos que se puede coger en la ciudad de Kemi. En él, podemos ver como este gigante se abre paso a través de una ancha capa de hielo. A mitad de recorrido, la embarcación detiene los motores y, gracias a unos trajes de flotación perfectamente aislados térmicamente, seremos invitados a tomar un refrescante baño.
En las zonas boscosas se hallan circuitos de Kart sobre hielo y nieve que son un buen reclamo para todos los amantes de las carreras. Este es solo para adultos y dura a aproximadamente media hora.
Si además viajamos en fin de año, especialmente con niños, la visita obligada será a conocer a Papa Noel, esto es posible en Rovaniemi, Finlandia. También podemos adentrarnos en su casa, para explorar su hogar, en Ruka. Donde, según el tipo de viaje contratado, seremos obsequiados en persona por Santa Claus con un regalo.
¿Que les ha parecido? ¿Les gustaría visitar Laponia?