Por cierto, ¡tantas veces demandado! Ya os hablé de los días necesarios para realizarlo aquí.
¿Lo bueno, si es breve, dos veces bueno?
Este interrogante además de una famosa cita del escritor Baltasar Gracián, apunta directamente a las supuestas bondades del ahorro del tiempo.
Mi pregunta entonces es sencilla: ¿y qué vas a hacer con el tiempo ahorrado? Yo te pediría que alargases tu Camino.
Pero si tu respuesta es: “no tengo tiempo ni para ahorrármelo, y además tengo la imperiosa necesidad de mirar por mi escasa economía…” Entonces tú lo que crees que necesitas es un Camino corto y barato.
En un mundo ideal, todo viajero debería tomarse al menos 5 semanas de su vida para hacer un Camino completo sin tener excesivos aprietos económicos.
El Camino de Santiago no es tampoco una burbuja ajena al mundo donde vivimos, en realidad se trata de una alegoría de la vida misma donde podemos cambiar algunos matices importantes.
Y si el tiempo o el dinero a priori no cuentan como matices a cambiar, tiene todo el sentido que os ayude a realizar un Camino de Santiago corto, barato pero ¡intenso!
Camino de Santiago más corto y bonito
Tengo muy pocos días libres, quiero conocer el célebre Camino de Santiago desde ya.
Me han bombardeado tanto mis conocidos con el temita, que no me queda más remedio que probarlo y unirme a sus conversaciones.
La magia del Camino
Cuando tu realidad te es esquiva, siempre te quedará recurrir a las artes mágicas.
Ten muy en cuenta que al Camino de Santiago se le conoce también como el Camino Mágico de las Estrellas.
Sí, sí, tú ríete, ¡cómo se nota que aún no has puesto una bota sobre él!
Se dice que cuando estás pasándotelo muy bien, el tiempo pasa demasiado deprisa.
Sin embargo, en el Camino disfrutas de escándalo y el tiempo pasa despacio.
¿Resultado? Las horas y los días se alargan.
Tu sensación es que has vivido más y mejor tu estancia sobre el Camino. ¿Aún no me crees?
Recuerdo a una viajera empedernida que su actual vocación es la de hacer aterrizar en el mundo real a peregrinos que vienen de realizar largos trayectos.
Si de verdad entras –nada de sólo pisar– más de un mes en el Camino, el mundo al que retornarás tras Compostela, nunca volverá a ser el mismo.
¿Todavía sigues sin creerme? Sólo te resta probar la magia del Camino de Santiago. Busca tu tiempo por poco que sea.
Caminar en verano
La física nos dice que los días se “alargan” en verano ¿verdad? O al menos las horas de luz solar.
Además la época estival suele ser la estación donde tenemos más tiempo de calidad para nosotros, sobre todo en época de vacaciones. ¡Bendita palabra!
Pues aquí se trata de sumar las horas de luz con tu tiempo libre para abrir una ventana temporal donde colarte dentro del Camino de Santiago.
Ajustar los traslados
Eres una viajera empedernida curtida en mil rutas, donde lo menos importante es el medio de transporte que te permita avanzar.
¿Conoces el tren del Camino?
Viaja por la noche hacia lugares del Camino de Santiago a 100 km. de distancia de Compostela:
Lugo en el Camino Primitivo
Orense en el Camino Sanabrés
Sarria en el Camino Francés
Ferrol en el Camino Inglés
Monforte de Lemos en el Camino de Invierno
Según bajas del tren-hotel a primera hora de la mañana, con la fresca, te calzas las botas, la mochila y a seguir tus flechas amarillas.
Te acuestas de día en un lugar conocido y despiertas horas después en otro desconocido. El problema aquí estriba en dormir ante el cúmulo de emociones y traqueteos.
Todo esto está muy bien pero…
¿A mí quién me dice cuál es el Camino más corto?
La respuesta solemne sería: haz los últimos 100 km. para obtener tu Compostela en 5 días para una cómoda media de 20 km. por etapa.
Lugo, Sarria, Orense, Ferrol, Vilalba, Tuy o Muxía podrían ser tus próximos puntos de partida.
Entre todos ellos, Lugo y su Camino Primitivo son 100 km. muy justos.
Mi respuesta personal
Removería Roma con Santiago –aquí nunca mejor dicho– para alejarme 300 km. de Compostela y hacer un mínimo de 3 semanas de Camino.
Y aquí tenemos el “Club de los 300” del que ya hablé largo y tendido en un post anterior:
Camino Francés desde León
El Camino Primitivo desde Oviedo
Camino del Norte desde Gijón o Avilés
El Camino Portugués desde Oporto
Tengo que confesarte que el tiempo en el Camino de Santiago es un factor decisivo, sería de lo último que prescindiría una vez tomada la decisión de hacerlo.
El Camino más barato
Voy a partir de un principio básico:
No es más rico el que más tiene, sino el que menos necesita.
Ten en cuenta que el Camino de Santiago está pensado para viajar con lo mínimo indispensable, y además según avanzas, te vas desprendiendo de lo creías necesario para centrarte en lo indispensable.
La mochila en este último aspecto te sale barata, los albergues donde dormir son baratos y además te permiten cocinar tus propios platos.
Si no eres cocinillas, siempre te quedará el socorrido menú del peregrino, o arrimarte a un grupo de peregrinos, esperando el milagro de la multiplicación de los panes y de los peces que sencillamente se basa en compartir.
Y hablando de grupos. Unirte en el Camino a un grupo te puede llevar a compartir ciertos gastos.
Aquí, en este blog, te ayudamos hasta a conectar con gente.
Visita nuestra tienda Ya para nota, aquellos que su umbral económico no admite ni una sola alegría extra, tengo un post titulado: Cómo hacer el Camino sin dinero.
Por cierto, ten mucho cuidado con el Camino del Norte en época vacacional, pues coincides con el turista de temporada que busca la bellísima costa cantábrica como lugar de veraneo.
Desde luego en verano las rutas interiores son más baratas, aunque algunas como la vía del Francés no están lejos del ajetreo vacacional del peregrino temporero.
Ahora para la traca final, me voy a mojar y contestar decididamente la pregunta que da título a esta entrada…
¿Cuál es el Camino de Santiago más corto y más barato?
Entras por la Catedral de Santiago por la puerta de la Plaza de Platerías, sigues por el crucero hasta llegar a la girola, subes al camarín del apóstol sobre el altar mayor y abrazas al santo como es tradición.
Plaza de Platerías en Santiago de Compostela
A continuación, bajas al mausoleo que está al ladito, visitas la urna donde reposan los restos de Santiago, subes y si tienes la suerte de viajar en año santo, sales por la Puerta Santa hacia la Plaza de la Quintana.
Puerta Santa de la Catedral de Santiago de Compostela
Más o menos unos 300 metros, 5 minutos si no hay excesivas colas y como guinda al pastel, totalmente gratis
¡Buen Camino peregrinos!