México, DF, viernes 13 de junio de 2014.? Mucho han cambiado las cosas en la selección japonesa desde su debut en una fase final de la Copa Mundial de la FIFA? hace ahora 16 años. El equipo está ya listo para la que será su quinta participación consecutiva en el certamen desde Francia 1998.
Así como la selección de aquella edición estaba compuesta exclusivamente por jugadores del campeonato de liga japonés, hoy más de la mitad de los seleccionados viven desperdigados por el mundo y disputan algunas de las ligas más importantes del planeta. Una de estas estrellas que ejercen su oficio en el extranjero es Maya Yoshida, que antes de fichar por el Southampton de la Premier League inglesa jugó también en la Eredivisie holandesa.
El central se prepara ahora para debutar en la competición cuando su equipo se estrene en la Copa Mundial de la FIFA 2014 en un partido contra Costa de Marfil. FIFA TV se entrevistó con él para hablar del efecto que tienen sobre el equipo los jugadores que disputan ligas extranjeras, la Copa FIFA Confederaciones Brasil 2013 y la inspiración que supuso para él seguir el Mundial de 2010 por televisión.
FIFA TV: Ninguno de los jugadores japoneses que acudieron a la Copa Mundial de 1998 jugaba en ligas extranjeras. Hoy, en cambio, 12 integrantes de la selección están afincados fuera de Japón. ¿Cómo cree que pueden haber cambiado o evolucionado los jugadores japoneses en otras ligas?
Maya Yoshida: Creo que, a la hora de abordar una competición, es importante ser capaz de plantar cara a diario a jugadores de primera clase. Esa experiencia es, en mi caso, lo que más ha cambiado. Si comparamos la situación actual con la de hace cuatro años, hay muchos más jugadores japoneses en equipos extranjeros, y creo que tras el Mundial habrá todavía más japoneses jugando en ligas foráneas.
Personalmente, ¿ha progresado usted en Europa?
En Japón jugaba casi siempre con futbolistas japoneses. En Inglaterra y Holanda, sin embargo, he tenido ocasión de compartir mi juego con futbolistas muy distintos, holandeses e ingleses muy fuertes físicamente. Al cambiar mi entorno, competir con jugadores europeos y sudamericanos acabó convirtiéndose en algo normal, pese a que me resultaba muy llamativo al principio. Los partidos internacionales dejaron de ser una situación desacostumbrada y muy especial y son ahora algo de lo más corriente.
¿Qué influencia ha tenido Alberto Zaccheroni en el equipo?
Creo que nuestro seleccionador entiende de verdad a los japoneses. Nos ha enseñado a competir con los mejores equipos europeos sin por ello abandonar el estilo japonés.
¿Le ha ayudado a preparar la Copa Mundial haber participado en la Copa Confederaciones?
Antes de la Copa Mundial, Brasil ha había sido la anfitriona de la Copa Confederaciones, y en aquella ocasión tuvimos una oportunidad real de hacernos una idea del país, dentro y fuera del terreno de juego. Más allá del calor y del entorno, conseguimos conocer Brasil a través de otros elementos ajenos al fútbol, como la comida y la vida fuera del hotel. Creo que el hecho de conocer ya el país supondrá una diferencia considerable. Aun cuando nuestros resultados en la Copa Confederaciones no fueron buenos, para nosotros la experiencia de competir con algunos de los equipos considerados entre los mejores del mundo fue muy valiosa.
El lema de la federación japonesa de fútbol es Yume wo Chikara ni 2014 ("Convierte tus sueños en poder"). ¿Cuál es su sueño para este Mundial?
De entre la enorme cantidad de gente que juega al fútbol en todo el mundo, apenas un puñado puede disputar esta competición. Hace ahora cuatro años veía el Mundial por televisión y me moría por estar en el terreno de juego. Sueño con alcanzar un resultado mejor que en la edición anterior. En realidad, no es tanto un sueño como un objetivo.
Hay algo que recuerde en especial de aquella época en la que seguía la Copa Mundial a través del televisor de su hogar?
Entonces Japón obtuvo mejores resultados de los que la gente esperaba. Fue también el año en el que jugadores a los que ya conocía por haber jugado contra ellos en Japón, como [Keisuke] Honda y [Eiji] Kawashima, dieron muestras de su talento. En ese sentido, la Copa Mundial se me antojó algo muy cercano. Desde entonces, jugar en la fase final dejó de ser un sueño abstracto y se convirtió para mí en un objetivo concreto. Ahora que estoy en Brasil, lo que hace cuatro años era un sueño está a punto de transformarse en un objetivo.
*Con información de FIFA