Antes de dedicarse al cine, Will Smith comenzó su carrera en el mundo de la música con el grupo DJ Jazzy Jeff & The Fresh Prince, con el que triunfó hasta el punto de ganar un premio Grammy en 1988. Dos años más tarde comenzaría la serie que supuso su salto a la interpretación, con El príncipe de Bel Air, que estuvo en antena desde 1990 a 1996.
A partir de ahí Will Smith continuó compaginando su carrera como músico y como actor y en el año 1996 se estrenó la que se convirtió en su primera gran producción, Independence Day. Un año más tarde, Men in Black sentenciaría su lanzamiento al estrellato.
En paralelo Will Smith, sacó varios álbumes en solitario, como Big Willie Style y Willennium, que obtuvieron grandes ventas.
Así, uno de los momentos álgidos de su carrera cinematográfica fue el año 2001, cuando fue nominado al Óscar al mejor actor por la película Ali, en la que interpretaba al popular boxeador Muhammad Ali. Cinco años más tarde, en 2006, volvió a ser nominado por En busca de la felicidad, en la que también participó su hijo Jaden Smith.
Mientras tanto, el actor siguió sacando álbumes, como Born to Reign, un fracaso en ventas, y Lost & Found, con el que volvió a triunfar en las listas.
Desde entonces, el actor no ha dejado de protagonizar grandes éxitos y producciones como Soy Leyenda, Hancock, Siete Almas, Men in Black III y After Earth.