Airbnb es una web donde particulares alquilan sus pisos, casas, etc por días, se pueden encontrar viviendas completas o habitaciones en pisos compartidos con los anfitriones en cualquier parte del mundo. Los anfitriones deben cumplir con la normativa legal del país donde está la vivienda e incluir en el precio los impuestos correspondientes.
El proceso es muy sencillo, en el buscador ponemos el nombre de la ciudad donde queremos alojarnos, entre que fechas, cuantas personas somos y si queremos alojarnos en una vivienda completa o compartida, y a partir de ahí vamos viendo la oferta de viviendas que nos proponen. En cada anuncio encontraremos información detallada de donde está situada la vivienda, los servicios que incluye, la política de cancelación, el precio, un montón de fotos de la vivienda y opiniones de otros viajeros que ya se han alojado ahí.
Una vez escogemos que pisos nos gustan nos ponemos en contacto con los distintos propietarios usando el sistema de mensajería que nos ofrece la web, comentándole en que fechas estamos interesados en alojarnos en su vivienda y esperamos a que acepten nuestra estancia. Os recomiendo que en vuestro perfil pongáis cuanta más información fiable mejor, incluso que añadas algún acceso a tus redes sociales, ten en cuenta que los anfitriones antes de aceptar tu estancia querrán saber quien va a ser su inquilino y si ponemos poca información no se van a fiar. Una vez tengamos claro cual es el piso escogido y , después de que el anfitrión nos de el ok, procedemos al pago a través de la web de una forma completamente segura.
A partir de ahí solo queda esperar a la fecha de nuestro viaje!! Yo me puse en contacto con nuestra anfitriona en alguna ocasión para hacerle alguna consulta sobre distancias en Ámsterdam o como desplazarnos para ir al lugar donde se celebraba el concierto y el trato siempre fue muy agradable. Unos días antes de irnos acordamos con ella como sería la entrega de llaves, en nuestro caso nos las dejó en un café que había muy cerquita aunque pudimos hablar con ella ese mismo día y estuvo siempre dispuesta a atendernos en el caso de que nos hiciese falta algo.
Las fotos que podéis ver en esta entrada son las del estudio que escogimos nosotros, os dejo el enlace directo al anuncio por si en alguna ocasión os queréis alojar allí: Lovely studio in Ámsterdam. Nuestra estancia fue de viernes a domingo y el precio fue de 185€ pero los precios en esas fechas en hoteles de no mucha calidad eran superiores. El estudio nos pareció precioso, en el ático de un edificio típico de la ciudad, la cama era comodísima y no le faltaba de nada. La anfitriona nos dejo un “kit de supervivencia” para el aseo que tenía absolutamente de todo tanto para chica como para chico, y en la cocina alguna cosita por si queríamos desayunar o tomarnos un té, etc. En un corcho que había en la pared estaba la clave de WiFi que funcionaba perfectamente, y información sobre restaurantes, museos, teléfonos de interés, etc.
La experiencia nos encantó y volveremos a repetir con airbnb en próximos viajes. Es una forma diferente de alojamiento, sin la rigidez que a veces proporcionan los hoteles, con la comodidad de tener una vivienda completa para ti y de alojarte como lo hacen los ciudadanos de esa ciudad. Ahhh y en esta web no solo nos encontramos pisos o casas, también puedes encontrar cabañas en arboles, castillos o alojarte en un velero!!