Té matcha
Se trata de la hoja entera del té verde, que tras un proceso especial de cultivo, recolección y secado, se muele para obtener un polvo fino de color verde intenso que multiplica los beneficios del té verde. Un solo vaso de té matcha equivale a 10 vasos de té verde en contenido de antioxidantes y valor nutricional.
Gracias a su versatilidad y textura en polvo, el té matcha es apto en distintas recetas como helados, smoothies (batidos de fruta con productos lácteos) o distintas preparaciones de repostería. Hay dos formas de clásicas de prepararlo: el usucha o ligero, que se hace con dos gramos, y el koicha o espeso, en cuyo caso se utilizan cuatro gramos para conseguir una consistencia espesa.
Utensilios para su elaboración
Su elaboración requiere todo un ritual de utensilios específicos como una cuchara de bambú fabricada a mano, un cuenco especial por su tamaño y capacidad y una varillas finas, también de bambú. Bueno, hay quienes lo hacen en una taza normal y corriente, como Cristina Pedroche. Cuando se cuela y se sirve no hace falta añadirle azúcar ni otros aditamentos. Hoy existen, además, muchos tipos de té matcha: desde los aromatizados con frutas o los biológicos, cultivados de forma ecológica.
¿Sabías que en Okinawa, Japón, uno de los lugares donde la gente vive más tiempo, se debe a su consumo regular de este té? Estupefacto me hallo. ¡Todos a beber té matcha! Sí, como locos.
La bebida que está de moda
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