Esta región mejor conocida por ser el escenario de la novela del siglo XVII de don Miguel de Cervantes, Don Quijote de la Mancha. Este es uno de los libros más famosos que han salido de España. Aquí, te llevamos de gira por Castilla-La Mancha para visitar algunos de sus mejores lugares de interés.
10 Lugares que ver en Castilla-La Mancha
1.- Molinos de viento en Campo de Criptana
Uno de los lugares más emblemáticos que ver en Castilla-La Mancha es el paisaje de los molinos de viento blanco. Estos se pueden ver en Campo de Criptana, un municipio de la provincia de Ciudad Real. Conocido como ‘La Tierra de los Gigantes’, este es el lugar donde el autoproclamado caballero Don Quijote se reunió con los gigantes (en realidad los propios molinos de viento).
Hay visitas guiadas a la Sierra de los Molinos, así como la oportunidad de visitar algunos que se han convertido en museos. Solo hay tres molinos de viento que conservaron su estructura y maquinaria originales del siglo XVI: Infanto, Burleta y Sardinero.
2.- Casas Colgadas de Cuenca
Toda la ciudad amurallada histórica de Cuenca ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Esto se debe a que es un ejemplo excepcional de fortaleza medieval y ha sido notablemente bien conservada. Construido por los moros en una posición defensiva en las colinas, fue conquistado por los castellanos en el siglo XII.
La ciudad es mejor conocida por sus extraordinarias Casas Colgadas. En una época, toda la faz de la Garganta de Huécar estaba cubierta de casas colgadas. Pero hoy solo quedan tres, que fueron completamente restauradas a principios del siglo XX. Están construidas en estilo gótico tradicionales con intrincados detalles de madera y entradas de estilo renacentista.
3.- Alcázar en Toledo
Situada en la cima más alta de Toledo, la fortaleza del Alcázar es sin duda un lugar imperdible que ver en Castilla-La Mancha. Esta estructura fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La construcción actual fue ordenada por el emperador romano Carlos V también conocido como Carlos I Rey de España como residencia real. Esto se hizo sobre los restos de un antiguo castillo medieval en el mismo lugar.
Tomó muchos años en completarse y presenta muchos estilos arquitectónicos. Sin embargo, antes de que terminara, la capital de España se mudó a Madrid. Por esto en realidad nunca vivieron los reyes, solo las reinas viudas. También sirvió para ser la Prisión de la Corona, cuarteles militares y talleres de seda. Además de como defensa durante la Guerra Civil Española. Hoy, el último piso renovado contiene la Biblioteca de Castilla-La Mancha.
4.- Arte rupestre paleolítico antiguo
Entre los verdaderos tesoros que ver en Castilla-La Mancha se encuentran las antiguas pinturas de arte rupestre encontradas en cuevas de toda la región. Estas son conocidas como el Arte Rupestre de la Cuenca Mediterránea Ibérica, o el Arte Levantino.
Castilla-La Mancha es el hogar de 93 de estos sitios de arte rupestre, que se remontan al Paleolítico e incluso al Mesolítico de la Edad de Piedra. Incluyen figuras simples de humanos, así como muchos animales como venados, cabras, jabalíes y ganado. Estas imágenes fueron pintadas con minerales rojos o carbón.
5.- La ciudad natal de Don Quijote, El Toboso
Cervantes centró su novela en el pequeño pueblo de El Toboso, en la provincia de Toledo. Aquí puedes visitar el Museo-Casa de Dulcinea, la casa de Doña Ana Martínez Zarco de Morales. Esta ha sido identificada como el personaje de Dulcinea, la doncella de Don Quijote y su interés amoroso en el libro.
Una típica casa de campo Manchega que data del siglo 16, se describe cómo habría sido en el tiempo de Quijote. Con los equipos agrícolas antiguos y utensilios de cocina, así como muebles. En el patio se encuentra una de las prensas de aceite más grandes de La Mancha.
Otra parada interesante es el Museo Cervantino. Aquí hay una colección de 198 ejemplares de Don Quijote de la Mancha traducidos a muchos idiomas. No olvides visitar el monumento dedicado a Don Quijote y Dulcinea. Si buscas los sitios más interesantes que ver en Castilla-La Mancha y eres fan del Quijote, esta visita no puede faltar.
6.- Catedral de Sigüenza
Levantándose desde el corazón del casco antiguo está la pieza central de Sigüenza: la catedral. Iniciada como una estructura románica en 1130, el trabajo continuó durante cuatro siglos a medida que la iglesia se expandía y adornaba. El resultado en gran parte gótico está entrelazado con elementos de otros estilos. Desde el plateresco hasta el renacimiento y el mudéjar.
La iglesia sufrió graves daños durante la guerra civil, pero posteriormente fue reconstruida. El interior oscuro tiene una sensación melancólica y antigua. Cuenta con algunos vitrales finos, además de un impresionante retablo del siglo XV.
Para entrar en las capillas, la sacristía y el claustro gótico, deberás unirte a una visita guiada pero vale la pena. Un punto culminante es la Capilla Mayor, hogar de la estatua de mármol de Don Martín Vázquez de Arce. Este caballero murió combatiendo a los musulmanes en las etapas finales de la Reconquista.
Particularmente hermosa es la Sacristía de las Cabezas, con un techo adornado con cientos de cabezas esculpidas. La Capilla del Espíritu Santo cuenta con una entrada que combina estilos platerescos, mudéjares y góticos. Dentro hay una cúpula notable y una Anunciación de El Greco. Sin duda un hermoso lugar que ver en Castilla-La Mancha.
7.- Sinagoga del Tránsito
Otro hermoso lugar que ver en Castilla-La Mancha es esta magnífica sinagoga. Fue construida en 1355 por un permiso especial de Pedro I y ahora alberga el Museo Sefardí. La gran sala de oración principal ha sido restaurada por expertos. La decoración Mudéjar y el techo de pino tallado intrincado son sorprendentes. Las exposiciones proporcionan una visión de la historia de la cultura judía en España. Además incluyen hallazgos arqueológicos, un jardín conmemorativo, trajes y artefactos ceremoniales.
La antigua judería de Toledo fue una vez el hogar de 10 sinagogas y comprendía alrededor del 10% del área de la ciudad amurallada. Después de la expulsión de los judíos de España, la sinagoga fue utilizada de diversas maneras como priorato, ermita y cuartel militar. Si buscas un lugar interesante que ver en Castilla-La Mancha, esta sinagoga debe estar en tu lista.
8.- Castillo de Calatrava la Nueva
Este magnífico castillo-monasterio se yergue a unos 6 km al sur de la ciudad de Calzada de Calatrava y 30 km al sur de Almagro. Desde aquí una vez controló el camino hacia Sierra Morena y Andalucía. Un camino empinado y pedregoso te lleva a la cima, donde puedes mirar boquiabierto las hermosas vistas. Además puedes estudiar la bien conservada iglesia del castillo y el monasterio con más detalle.
El complejo fue una vez sede de los Caballeros de Calatrava. Esta es la orden militar más antigua de España, fundada en 1158 para desafiar el poder moro en Iberia. Su base original fue Calatrava La Vieja, ubicada a 60 km al norte. A medida que los cristianos avanzaban más en el territorio árabe, los Caballeros de Calatrava comisionaron esta ciudadela más nueva en 1217. Fue construida con el trabajo de los prisioneros atrapados en la batalla.
9.- Palacio de los Duques del Infantado
La única razón para visitar Guadalajara, además de cambiar de autobús, es excelente. El antiguo palacio del ilustre clan Mendoza es único en España, como atestigua su ornamentada fachada salpicada de puntiagudas piedras en forma de diamante. Visita el Patio de los Leones, y tu pulso se acelerará al ver un exceso de motivos tallados que recubren las columnas.
El palacio alberga el museo de la ciudad y vale la pena ver su cerámica de Talavera, estuco hebreo y pinturas de Cano y Ribera. Disfruta también de Las Salas del Duque, donde magníficos frescos del siglo 16 del artista italiano Romulo Cincinato sobrevivieron a un bombardeo durante la Guerra Civil. El palacio ha sido bellamente restaurado.
10.- Segóbriga
Las ruinas romanas mejor conservadas que ver en Castilla-La Mancha se remontan al siglo V antes de Cristo. Lo más destacado es un Teatro Romano y un Anfiteatro en las afueras de la ciudad antigua, con vistas a un valle.
Otros restos incluyen los contornos de una Basílica Visigoda y una sección del Acueducto que ayudaron a mantener la ciudad verde en lo que de otra manera sería un desierto. Un pequeño Museo tiene algunas exhibiciones llamativas.
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