Esta ciudad, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, se encuentra a tan solo 100 kilómetros al oeste de Madrid, siendo famosa por sus espectaculares murallas medievales, perfectamente conservadas, que la rodean como un brazo protector. Estas murallas de Ávila son un emblema de la ciudad y se mantienen casi intactas desde el siglo XI. En su interior, un laberinto de calles empedradas, plazas encantadoras y una gran cantidad de iglesias y conventos históricos, testimonian la riqueza del patrimonio religioso de Ávila. Uno de los monumentos más emblemáticos de la ciudad es la catedral de Ávila con su impresionante estructura gótica.
La gastronomía abulense es otro atractivo, con platos tradicionales como las judías del Barco o el chuletón de Ávila. contando con numerosos restaurantes y bares donde poder disfrutar de la deliciosa cocina local. En este artículo, vamos a hacer un repaso a los principales lugares que ver en Ávila en 3 días, destacando aquellos atractivos turísticos indispensables que visitar.
Murallas de Ávila
Las murallas de Ávila son parte fundamental para considerar la ciudad Patrimonio de la Humanidad y el monumento más emblemático que visitar en Ávila. Esta impresionante construcción rodea el casco histórico de la ciudad de Ávila, consiguiendo trasladar a los visitantes a la época medieval, al mantenerse prácticamente inalterada desde su construcción en el siglo XI. Las murallas, con una longitud de alrededor de 2,5 kilómetros y una altura que alcanza los 15 metros en algunos lugares, son una maravilla arquitectónica que puede recorrerse durante la visita a Ávila.
Estas murallas están construidas con granito y decoradas con 88 torres semicirculares y 9 puertas que solían servir como puntos de entrada y salida a la ciudad. La imponente estructura fue diseñada con propósitos defensivos, siendo una forma eficaz de proteger a la población en caso de ataque desde el exterior..
La puerta de Alcázar
La puerta del alcázar de Ávila es una de las nueve puertas históricas que se encuentran en las impresionantes murallas de la ciudad de las que acabamos de hablar. Esta puerta es una entrada emblemática al casco antiguo, convirtiéndose en una de las más notables por su ubicación y arquitectura. La puerta del alcázar, construida en el siglo XVI, es un ejemplo destacado del estilo renacentista español y se caracteriza por su estructura de granito, su arco de medio punto y los elementos ornamentales que la adornan.Destacan sobre la puerta los dos escudos de armas a ambos la puerta, lo que refleja su importancia histórica y su vinculación con la realeza. Esta puerta debe su nombre al alcázar de Ávila, una fortaleza que se encuentra en la proximidades, y, que también es un atractivo de interés turístico en la zona.
La catedral de Ávila
La catedral de Ávila, conocida como la catedral de San Salvador, es el principal monumento religioso que ver en la ciudad, y, una joya del arte gótico. Esta catedral fue construida en el siglo XII, siendo una de las primeras catedrales góticas de España y se ubica en el corazón del casco histórico de Ávila. La catedral destaca por su grandiosa arquitectura y su imponente presencia, gracias a sus altas torres y su fachada ornamentada. Se trata de un claro ejemplo del gótico español, con un acceso a través de la conocida como la puerta del perdón, notable por su detallada decoración escultórica.
En el interior, los visitantes quedan asombrados por la magnífica bóveda de crucería, las vidrieras multicolores y los numerosos altares y capillas que albergan obras maestras de la pintura y la escultura religiosa. Uno de los elementos más destacados es el Retablo Mayor, una obra maestra renacentista que narra la vida de Cristo. La Catedral de Ávila es también famosa por su cimborrio, una estructura octogonal que se alza sobre el crucero. Además, desde su cima, se obtienen vistas panorámicas de la ciudad y las murallas de Ávila.
El Mercado Chico
El mercado Chico de Ávila es otro lugar emblemático en el corazón de la ciudad, uno de los destinos más vibrantes para quienes visitan esta encantadora localidad. Este mercado, que se encuentra en la plaza homónima, ha sido el centro de actividad comercial y social en Ávila durante siglos. Se trata de un espacio donde se entrelazan la historia y la vida cotidiana, rodeado de edificios históricos, bares, restaurantes y tiendas de productos artesanales.Los puestos de venta ofrecen una amplia variedad de productos, desde alimentos frescos hasta artesanías y recuerdos, tal y como hemos mencionado. El ambiente del mercado es animado y colorido, especialmente durante los días de celebración de mercados, que suelen ser un día entresemana, y, otro el fin de semana. Los visitantes pueden disfrutar de la auténtica experiencia de mercado, interactuar con los comerciantes y probar algunos de los deliciosos productos locales.
La judería de Ávila
La judería de Ávila es otro rincón histórico que ver en Ávila, capaz de reflejar la importancia de la presencia judía en esta ciudad medieval durante la Edad Media. Este barrio está situado en el casco antiguo de Ávila, siendo testimonio de la diversidad cultural y la convivencia de comunidades en la ciudad. El barrio, como muchos otros en España, albergaba una población judía próspera que contribuyó significativamente a la vida económica y cultural de la ciudad.Las estrechas calles empedradas, las casas con estructuras de entramado de madera y los detalles arquitectónicos evocan una atmósfera histórica encantadora. Uno de los puntos destacados de la judería es la Casa de Abraham Seneor, que se cree que fue la vivienda de un importante rabino en la época. Además, la Sinagoga de Ávila, también conocida como Sinagoga Mayor, es uno de los vestigios más notables de la comunidad judía en la ciudad. Este lugar de culto ha sido restaurado y se puede visitar, ofreciendo una visión de la vida religiosa judía en Ávila.
El humilladero de los Cuatro Postes
El humilladero de los Cuatro Postes es uno de los monumentos más emblemáticos de Ávila y un lugar que evoca la espiritualidad y la historia de la ciudad. Este impresionante humilladero se encuentra en una colina al oeste de la ciudad y ofrece vistas panorámicas espectaculares de Ávila y su entorno. El nombre Cuatro Postes proviene de la estructura que consta de cuatro columnas de granito que sostienen una cubierta a cuatro aguas. En el interior del humilladero, hay una imagen de la virgen de Sonsoles, la patrona de Ávila.
La historia de este lugar se remonta al siglo XV, cuando se erigió inicialmente como un punto de bienvenida a los visitantes de la ciudad. Más tarde, en el siglo XVI, se construyó una ermita en el sitio para albergar la imagen de la virgen antes mencionada. El humilladero ha sido restaurado y modificado a lo largo de los siglos, pero ha conservado su carácter distintivo y su importancia religiosa y cultural. La impresionante puesta de sol que puede vivirse desde este rincón de Ávila es indispensable para todos los visitantes que deciden conocer la ciudad.
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