Los llamados deportes extremos o de riesgo, es una terminología aplicada a un grupo de actividades físicas, que en la mayoría de los casos pueden tener ciertos riesgos al practicarlo. Esto se refiere específicamente a que la integridad física se pueda ver afectada por la práctica, sin embargo, todas las personas que asumen integrarse a los deportes extremos, conocen muy bien ciertas técnicas y destrezas que son necesarias para que estos riesgos sean mínimos, así como los equipos necesarios para que la seguridad esté presente en todo momento.
Uno de los aspectos fundamentales de los deportes de riesgo es que aumenta de alguna manera muchos aspectos de la autoestima, algunos aseguran que se eleva el autocontrol, el manejo del miedo, la concentración y la determinación, que son factores que muchas veces en la vida cotidiana afectan psicológicamente.
Los deportes de riesgo también ayudan a que los conceptos de libertad se tomen en cuenta, ya que la mayoría de estos deportes no existen limitaciones en muchos aspectos. Por ejemplo, no hay reglas fijas ni horarios específicos, se puede practicar en cualquier momento, y aunque hay algunas sensaciones de riesgo, el placer por la aventura los supera. Esto es un factor muy importante, ya que la sensación de autorrealización y las capacidades, incrementan los aspectos psicológicos hacia una liberación mental y física, así como también la planificación de nuevos riesgos, que termina siendo eficaz en los momentos de toma de decisiones.
Son muchos los conceptos que arropan a los llamados deportes de riesgo, por lo que no se pueden definir como exclusivos, sin embargo, están agrupados en 3 sectores.
Los deportes de riesgo más comunes.
Los más practicados son los que se desarrollan en la montaña. Estos comprenden el senderismo, el rapel, la escalada, el barranquismo, la espeleología, el ciclismo de montaña, la equitación, y otros como el paintball.El grupo relacionado con el agua practica buceo, kayak, piragüismo, descenso en canoa, rafting. hidrospeed, entre otros.
Y los de aire lo hacen por medio del parapente, paracaidismo, tirolina, manejo de ultraligero, puenting, entre otros.
Algunas actividades de estos 3 grupos se pueden combinar, para crear circuitos de deportes extremos, donde también se incluyen otras actividades muy emocionantes y llenas de adrenalina como el caso del surf, snowboard, canyoning, kitesurf, motociclismo de montaña o acuático, natación en aguas abiertas, parkour, BMX, Skateboarding, buceo a pulmón, alpinismo, etc.
Hasta el día de hoy que han originado muchos debates en torno a la calificación que se le da a estos deportes, para muchos mal llamado de “riesgo”, sobre sí efectivamente practicarlos atenta contra la vida
Por un lado, muchos aseguran que las personas en su vivir cotidiano están expuestas a situaciones de riesgo, que inclusive pueden ser inconscientes. Correr, resbalar y golpearse la cabeza, subir a una escalera, un accidente de tránsito, entre otros, podrían estar considerados como actividades que también generan altos riesgos, por lo que quizás la terminología más adecuada sería, deportes que requieren más concentración y mejores condiciones físicas que los otros deportes, aunque por supuesto hay que agregar el aumento de adrenalina.