No recuerdo muy bien mi infancia y eso es lamentable. Me he olvidado de detalles importantes y hasta a veces no recuerdo cuando me tomaron la foto de mi primera comunión. Es triste. De verdad, lo es, pero con el tiempo he aprendido a tomar todo como algo nuevo que se convertirá en algo antiguo y que al final será un recuerdo o un olvido. Hay varias cosas nuevas últimamente. Desde la cámara que me compré hace unos meses, hasta las personas que he conocido hace unas semanas. He sufrido un cambio. Quizás eso ha hecho que pierda de vista a algunos amigos. Quizás eso demuestra que no puedo mantenerlos si no los necesito. Mi necesidad es esa coca cola que tomo para la clase de historia contemporánea. Mi necesidad es pasajero. Mi necesidad es egoísta. A veces es insconciente e incierta. Te puedo necesitar ahora y luego de un mes te necesitaré de nuevo, pero no me daré cuenta de las veces que te necesito. Te diré por facebook: "hola ¿qué tal? ¿cómo te trata la vida?" Tú me dirás: "hola, bien, todo bien, y tú?" Yo responderé: "todo tranquilo, hey este, "inserta cosa que necesitas de la otra persona". Tú me complacerás o simplemente me responderás un monosílabo negativo. Luego un gran fin. Yo te dejo en visto o tú me dejas en visto. Ya no te necesito. No estoy orgulloso de eso, pero estoy seguro que hay más personas como yo. O sea, quieres que mienta que me interesas. O sea, quieres que finja mi "Hola ¿Cómo estás?" ¿Quieres? Creo que si haría eso sería mucho más egoísta de lo que soy ahora.
Para finalizar este extraño post que escribo escuchando música clásica, les cuento algo. Un profesor de la universidad me preguntó si podía definirme en dos palabras. Yo le respondí: es difícil.