Aunque ya comentamos en esta noticia, que el americano no era el rival ideal para Usyk, hay que destacar que el ucraniano realizo un muy buen combate, empezando con una distancia prudente, estudiando y midiendo al rival.
Con el paso del tiempo la velada fue a más, Usyk imponiéndose con su gran jab, con combinaciones de uno y dos, contra un Witherspoon que poco a poco iba arrimándose más a las cuerdas de las continuas manos de su rival, sin capacidad para responder de forma clara y precisa.
Ya a partir del quinto asalto se vio a un Witherspoon cansado, recibiendo golpes de una manera contundente de su adversario, que lo fue castigando de una manera increíble, conectando manos que impactaban en su contrincante con una eficacia tremenda.
Ya en el descanso entre el séptimo y octavo el equipo de Witherspoon decidió abandonar, y era lo previsible, ya que pronto caería a la lona, tal como se iba desarrollando el combate, era imposible que ganara.
Ahora toca ver cuál será la próxima pelea de Usyk, donde los grandes medios de boxeo profesional vaticinan que lo tendrá complicado, ya que aunque hizo un buen combate, el rival no estuvo a la altura en ningún momento.