De repente niños y animales son una mezcla que siempre da buen resultado, a los pequeños les encanta disfrutar con ellos, así que nos pusimos en contacto con Pilar para concertar una cita para ese mismo día y así poder conocer de primera mano su granja.
Aprovecho la llamada de teléfono también para preguntarla donde se podría comer cerca de allí, y me aconseja el Restaurante Los Elefantes en Cabárceno del que os he hablado en un anterior post, y que resultó ser genial para ir con los niños.
A pocos minutos del restaurante en Cabárceno se encuentra el pueblo de Llanos, y allí, es donde está Alpacas de la Tierruca, un lugar increíble por su naturaleza, pero que además resulta ser mágico, ya que allí nos esperan unos animalitos muy pintorescos que nada tienen que ver con las ovejas a las que estamos mas acostumbrados a ver por aquí.
Según llegamos nos reciben muy amablemente, y entramos en una casita donde nos tienen preparada una sesión de mini cine para explicar a los pequeños que son las alpacas, su origen y muchas mas cosas sobre ellas.
Después de esta pequeña charla tan interesante, nos llevan directamente a la granja para ir a conocerlas, pero antes los niños recogen lo necesario para darles de comer cuando las encuentren.
Por fin tras un muy corto paseo, nos las encontramos ¡Pero que extrañas son! ¡Qué raras resultan ser y a la vez que bonitas! los niños están encantados, acariciándolas, dándolas de comer, paseando con ellas y viéndolas...
Después volvemos a las instalaciones donde nos proyectan de nuevo en el mini cine un cuento sobre ellas, y nos enseñan todo el proceso que conlleva la producción de lana de alpaca, incluída una bonita rueca que a las niñas les encanta porque enseguida la reconocen como la del cuento de la Bella Durmiente, tengo que reconocer que a mí también me gustó mucho ver una, pero sin duda la gran sorpresa es disfrutar de lo suave y gustosa que es la lana de las alpacas, increíble comparada a la de las ovejas. También nos enseñan diferentes hilos, como el del gusano de seda, el hilo de nilo, de camello y algunos mas. La verdad es que la clase sobre diferentes lanas y tejidos fue muy interesante.
Y cuando ya pensábamos que nuestra visita había terminado, resulta que Pilar nos tenía preparada una increíble merienda a base de productos cántabros, que incluían café, tes, batidos, dulces típicos del lugar como quesadas y bizcochos hechos con los huevos de sus gallinas y leche de las vacas de alrededores, vamos que mas rico y sano imposible.
Nuestro día llega a su fin, hemos pasado una tarde increíble, donde además de jugar y disfrutar con las alpacas, hemos aprendido todos mucho sobre ellas, y hemos merendado rico rico. ¡ nuestra tarde en la granja ha resultado ser una tarde 10! y por cierto, ¿sabías que organizan también cumpleaños? ¿no te parece un plan genial?