Fue sumido en una crisis creativa cuando Di Buenio comenzó a notar el calor de la llama de una buena idea comenzando a arder en su interior. En lugar de pensar exclusivamente como diseñador decidió ponerse en la piel de un potencial cliente y se preguntó "¿qué es lo que le gusta a la gente?", y la idea no tardó en llegar: las cosas gratis. Di Buenio es diseñador gráfico y lo que mejor sabe hacer son logotipos, así que decidió ponerse a prueba a sí mismo ofreciendo sus servicios gratis a cualquiera que lo necesitase. Apenas dos horas después de anunciarlo en sus redes sociales ya había recibido más de 70 peticiones y decidió ponerse manos a la obra.
El diseñador ruso ideó y ejecutó 50 logotipos en 32 horas de trabajo non-stop poniendo de manifiesto su potencial como diseñador eficiente. A esta performance de diseño lo bautizó como Logotyposhnaya y apenas unos meses después se embarcó en un segundo reto más ambicioso. En este segundo Logotyposhnaya recibió más de 130 peticiones de logotipos, aunque redujo su tiempo de trabajo a 12 horas y por lo tanto, únicamente llevó a cabo 20 de esos diseños. El resultado, no obstante, es merecedor de un aplauso.
El propio diseñador reconoce que estas performances son una manera de proponerse un reto a sí mismo. A diferencia de un encargo corriente, el momento de la conceptualización del logotipo es breve y apenas tiene oportunidad de conocer la visión del cliente acerca de su negocio, no obstante se ha convertido en un increíble ejercicio para desarrollar sus habilidades técnicas y creativas. De hecho, para Di Buenio este proyecto se mueve en la (a veces fina) línea que separa el arte y el diseño:
El valor del diseñador reside en su conocimiento y sus habilidades. El valor del arte está en la suerte y en las insinuaciones. Hagamos del diseño un arte. Di Buenio ¿Te atreverías a embarcarte en un reto de estas características?