El compositor checo Bedřich Smetana, en su obra "Mi patria" le dedicó uno de los seis poemas sinfónicos al río Moldava, el más largo de Chequia, que divide Praga en dos partes y nos permite disfrutar de las vistas panorámicas más bellas de la ciudad. El barrio de Malá Strana y la Ciudad Vieja están unidos por numerosos y románticos puentes que le dan el toque final a la vista.
Este post es la segunda entrega de Praga. La primera la podéis ver en el post anterior "10 imprescindibles que ver en Praga".
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RECOMENDACIÓN MUSICAL
Mientras lees esta entrada te recomiendo que escuches el poema sinfónico que Smetana dedicó al río Moldava (Moldau) en su obra " Mi Patria" (Má Vlast)
Vistas desde la Ciudad Vieja
Vista nocturna del Castillo el más grande de Europa) y de la Catedral de San Vito en la parte superior. Restaurantes para románticas cena a la luz de las velas se extienden por la orilla, y barcos panorámicos nos muestran la belleza de las dos orillas mientras se deslizan por las tranquilas aguas del río
La Catedral de San Vito es el mayor exponente de arte gótico de Praga. Ha sido el escenario de la coronación de todos los reyes de Bohemia y en ella se encuentran también enterrados todos los santos obispos y arzobispos y un buen número de reyes.
El puente de Carlos es el puente más viejo de Praga, y atraviesa el río Moldava de la Ciudad Vieja a la Ciudad Pequeña. Es el segundo puente más antiguo existente en la República Checa comenzado en el siglo XIV. Fue una conexión importante para el comercio entre la Europa Oriental y la Occidental.
La torre localizada en la cabecera de la Ciudad Vieja es considerada por muchos como una de las construcciones más impresionantes de la arquitectura gótica en el mundo.
Vistas desde Malá Strana
Ciudad Vieja con sus preciosas casas de colores
Catedral de San Vito con una curiosa pareja de novios
Vista del Puente de Carlos y la Ciudad Vieja vistos desde el Castillo entre la niebla
Puentes entre la niebla
Puentes