Bueno bueno, este post seguro que da para mucho pero antes os pongo en situación. Marta, de la libreta roja, lanzó hace unas semanas una propuesta para aquellos que vivimos en Alemania. Escribir una entrada sobre aquellas cosas que echaríamos de menos de Alemania si volviéramos a España.
Yo ya os conté en esta entrada las cosas que más y menos me gustan de Alemania así que os podéis hacer una idea de como es vivir aquí. La verdad es que muchos de nosotros hemos escrito cosas muy parecidas y es que Alemania tiene algunas cosas que enganchan. Quien me lo iba a decir hace 5 años…¿Queréis saber a qué me costaría renunciar si volviera a Barcelona?
DM: Sí, lo sé. Parece una frivolidad pero no existe nada igual en España. DM y Rossmann (o Rosmari como decía una amiga) son unas droguerías muy famosas en Alemania donde puedes encontrar toda clase de productos de cosmética, higiene personal, cosas para casa…lo mejor para mí son los precios. ¿Quien no ha pecado con las mascarillas a 50 céntimos? Sucede un poco con el fenómeno Colacao-Nesquik o Nutella-Nocilla. O eres de DM o eres de Rossmann pero, en cualquier caso, ambas opciones son igual de estupendas e igual de adictivas. Os dejo un link en alemán sobre un programa que hicieron sobre estas marcas y el porqué tenían tanto éxito…
La naturaleza: bueno, según la parte de España de la que vengáis sabréis a lo que me refiero. En Alemania la gente disfruta mucho de las actividades al aire libre da igual la época del año. En todas las ciudades existen parques/bosques en medio de la ciudad. Es curioso cuando buscas una dirección en google maps y de pronto ves una mancha verde gigante. Se agradece mucho con niños ir a pasear por una zona verde, con lagos y patos relativamente cerca de casa.
Los Spielplatz: (parques infantiles): pues eso aplica solo para los que tenemos hijos pero desde luego los parques son una pasada. El mobiliario urbano infantil me resulta alucinante comparado con España y normalmente suelen estar ubicados en los parques/bosques que os comentaba antes. Suele haber zonas en función de la edad de los niños y para mí nada tiene que ver con los parques de las ciudades españolas.
Ubicación de Alemania: Alemania está situada en el centro de Europa y eso hace que cualquier fin de semana puedas visitar un lugar nuevo situado a unas horitas de coche. Praga, Austria, Holanda…desde luego estando en España estas escapadas quedan reservadas para vacaciones y puentes y normalmente se va en avión. Nosotros somos mucho de alquilar con amigos casas familiares (Center Parcs) situadas por Alemania con muchas actividades para niños, una vez más, en medio de la naturaleza.
La educación/silencio: bueno, esto tiene sus pros y contras. No es oro todo lo que reluce en Alemania pero a mi en términos generales me parece que hay un nivel de civismo/educación más elevado que en España. La gente no tiene pelos en la lengua y te sueltan lo que piensan sin filtros (cuesta acostumbrarse) pero desde luego en términos generales me parecen más educados y cívicos que en España. Desde luego también son menos ruidosos y más respetuosos con el descanso ajeno (a veces llevado al extremo).
Sanidad: este también es un tema controvertido. La sanidad en España me parece de muy alta calidad pero el problema son las listas de espera y la cobertura. Aquí el sistema público es parecido al privado en España, pudiendo elegir el médico que te de la gana y no el que te “toca” según donde vivas. Algo que me parece increíble en Alemania es la cobertura dental. Sin ir más lejos ayer fui al dentista. Tienen que hacerme varios empastes, un tratamiento de periodontitis y una férula de descarga para dormir (lo sé, doy mucha penica). Bien, todo todito lo cubre mi seguro público. No quiero ni imaginarme lo que costaría todo en un dentista español.
Educación pública: bueno, no sé (todavía) si la calidad de la educación es mejor aquí o allí pero lo que sí sé es que la educación pública es la elegida por la mayoría de familias alemanas. Aquí no importa tanto el aparentar o el ir con el “hijo/hija de” al colegio. El criterio suele ser el colegio que más cerca esté de casa. No importa los salarios de los padres tanto como en España. Los colegios privados suelen ser los elegidos para hijos de expatriados que suelen estar poco tiempo en Alemania por lo que buscan una educación básicamente en inglés. De hecho, no son colegios que tengan muy buena fama por su nivel educativo.
Alimentación infantil: en general la comida alemana deja mucho que desear pero en cuanto a alimentación infantil se refiere creo que nos ganan por goleada. Aquí no veo padres con el bocata-chorizo y el zumo a las puertas del colegio. Se llevan su táper (sacrilegio lo del papel de aluminio) con su fruta, rodajas de pepino y paprika y frutos secos. Eso sí, el tema de la mantequilla para todo no lo supero. Aquí seguimos con el aceite de oliva como Dios manda
Navidad: aunque aquí no hay Reyes Magos con cabalgata me parece que las navidades en Alemania son preciosas, de cuento vamos. Los mercados de navidad y la nieve (que por otro lado cansa como todo) hacen de estas fechas unos días de postal. Todo tiene un halo mágico y aunque haya que vestir a los niños literalmente como si fueran a esquiar, un ponche infantil o un Glühwein le quitan el frío a cualquiera.
Los Bretzel: es una poco una banalidad y más cuando en España la comida está tan rica. Desde luego la comida alemana, a mi entender, no hay por donde cogerla pero algo que me cautivó desde el primer día fueron los Bretzel. No importa la hora ni el día. Tanto para desayunar, a media mañana, para merendar o para comer un día rápido con un Bretzel relleno de queso Camembert…son la solución ideal para saciarse en cualquier momento del día
Hasta aquí mi lista de cosas a las que me costaría renunciar. Tengo que deciros que mientras escribía he hecho una lista con cosas que NO echaría de menos para nada si me fuera y me está dando miedo…¿será que quiero volver a Barcelona y no lo sabía hasta ahora?
En breve seguimos con la Blogparade pero al revés…¿Qué cosas se os han hecho imprescindibles de Alemania?
Besicos