Hoy te daremos algunos consejos para que seas un turista responsable, quien tenga la precaución de viajar sin generarle daño al planeta. A la hora de elegir el destino se tendrá que pensar en el alojamiento, el clima, la vida nocturna, las atracciones y los sitios interesantes. Pero son pocas las personas que, además, se enfocan en que tipo de impacto generarán las vacaciones, el medio ambiente y el calentamiento global.
Con el incremento de los vuelos baratos cada vez son más los turistas que elijan sus destinos en playas exóticas, pero en muchos casos no se detienen a pensar los impactos que se generarán en esos destinos.
Cuando se habla de turismo responsable se refiere a un todo, a la elección del destino, la forma en que se llegará a él, políticas y aspectos culturales que se deberán conocer y tener mientras se esté de vacaciones, además del impacto que se va a tener en el entorno natural.
Un punto muy importante para llevar adelante este tipo de turismo es consumir localmente. Intentar encontrar lugares sonde vayan los lugareños y probar la cocina local. Esto colaborará con las tradiciones artísticas culturales y a los negocios del lugar.
Escoge un buen operador de tours. Muchos operadores se encargarán de armar interesantes itinerarios personalizados, una forma de asegurarse de que gran parte de los beneficios que se empleen serán destinados a apoyar al desarrollo local.
Aprovecha para utilizar el transporte público. Antes de viajas deberás averiguar las distintas opciones de transporte público que se tendrá al alcance. También podrás consultar en el hotel, generalmente te darán algún mapa o encontrarás alguna app que te ayude.
También habrá que saber la manera en qué funcionan y el costo. Además de ser una forma económica y amable para tu bolsillo es una excelente alternativa para quienes quieran cuidar el medio ambiente. Otra ventaja es que estarás en contacto directo con los lugareños.
Otra buena opción para conocer un lugar nuevo es a pie o con una bicicleta. Es la manera de disfrutar tomando un ritmo propio, se pueden explorar las calle locales, detenerse a tomar un café o almorzar en un sitio diferente. En este sentido siempre deberás consultar en el hotel acerca de los lugares que podrían resultar peligrosos. No solo será una forma de cuidar el medio ambiente sino que ayudará a quemar las calorías extra de los platos de comida típica que habrás disfrutado.