El Guernica en el Museo Reina Sofía de Madrid
Fue un lienzo viajero. Tras la expo de París, pasó por Oslo, Estocolmo, Gotemburgo, Manchester, Londres, París, Copenhague, San Francisco, Chicago, Los Ángeles o Nueva York. Aunque la inspiración tardó en llegarle, el bombardeo de Guernica le sirvió como punto de partida. Sin embargo, en el lienzo no hay ninguna referencia concreta al bombardeo del pueblo vasco ni a la Guerra Civil española.
Guernica, 1937
El cuadro fue realizado en grandes dimensiones y, pese a su enorme complejidad, se pintó en tan solo siete semanas. En el lienzo aparecen representados nueve símbolos: seis seres humanos y tres animales (un toro, una paloma y un caballo).
El toro, que aparece en la parte izquierda de la obra, simboliza la brutalidad y oscuridad.
El toro
La paloma, difícil de ver entre el toro y el caballo, es símbolo de la paz rota.
La paloma
El caballo atesora numerosos simbolismos del cuadro. Está atravesado por una lanza y en su costado se abre una herida vertical. Además adelanta una de sus patas delanteras para mantenerse en equilibrio y no caerse. Simboliza a las víctimas inocentes de la guerra.
El caballo
Bajo el toro, se sitúa una madre con su hijo muerto en brazos. Los ojos del niño carecen de pupilas por estar muerto. El modelo iconográfico de esta figura no es otro que el de la Vírgen María.
Madre con hijo muerto
Ubicada en el centro superior del cuadro, la bombilla es una de las imágenes que más intriga despierta. Se ha dicho que ésta representa el avance científico y electrónico. También puede ser interpretada como una pupila del ojo de la providencia.
La bombilla
A la derecha del cuadro podemos observar un hombre mirando al cielo como rogando a los aviones para que cesen los bombardeos. El hombre está inspirado en el cuadro de Goya El 3 de mayo de 1808 en Madrid.
Hombre implorando
Lo que Picasso quiso transmitir con esta gigantesca y espectacular obra de 776,6 cm x 349 cm fue la "incongruencia humana al escoger la violencia". Este icono del siglo XX se encuentra en el Museo Reina Sofía de Madrid. La localidad de Gernika cuenta con una reproducción del cuadro en un mural cerámico.
Mural cerámico en Gernika
Lo cierto es que poco, más bien nada, hemos aprendido de aquel cuadro. Las guerras y la violencia continúan, no hay más que ver el Telediario.