Pero hoy fue distinto. Fui a ver Avengers: Endgame (2019) en su día de estreno en México y no puedo creer cuánto la amé y, sobre todo, cuánto lloré.
Y es que eso pasa con el cine de superhéroes, es un gusto que uno va adquiriendo con el tiempo, casi siempre por amigos o familiares que ya son fans.
Y un buen día, de la nada, tú también estás a media noche buscando boletos para ver Endgame.
En esta cuarta entrega de Avengers, dirigida por Anthony y Joe Russo, los supervivientes del chasquido de Thanos en Infinty War se reúnen para tratar de derrotarlo, ahora con la ayuda de Capitana Marvel y los recién rescatados Iron Man y Nebula.
Sin embargo, al dar con el sitio donde Thanos se encuentra descansando, descubren que ha destruido las seis gemas del infinito, borrando toda esperanza de recuperar a la otra mitad del universo.
Tras una larga espera (y severos traumas emocionales), a Los Vengadores se les presenta una nueva oportunidad: regresar en el tiempo y conseguir las Gemas del Infinito antes que Thanos.
Así, Avengers Endgame se convierte en una constante persecusión a lo largo de otras películas de la Fase 3 del MCU que llena de tensión y nostalgia por igual.
¿Por qué? Porque al final del día sabes que los Vengadores ganarán la batalla "cueste lo que cueste", en el fondo lo sabes.
El problema, la pregunta que te tortura por más de tres horas es precisamente el costo: cómo podrían hacerlo y qué tendrán que sacrificar para lograrlo.
Endgame marca el fin de la saga Avengers y la conclusión de la Fase 3 del Universo Cinematográfico de Marvel (MCU), pero también es cierre a nivel emocional.
Esta película es un adiós definitivo a personajes como Iron Man (Robert Downey Jr.), Capitán América (Chris Evans) y Thor (Chris Hemsworth), entre muchos otros que conocimos a lo largo de 10 años.
Los hermanos Russo lo sabían y por eso se encargaron de crear lo que probablemente sea la trama más emocionante y dolorosa de Marvel hasta ahora; acompañada, claro, de los excelentes efectos especiales que ya todos conocemos.
Si hay algo que criticarle, porque siempre lo hay, es que Avengers 4 nos creó demasiada expectativa de lo que podrían lograr personajes más recientes, entre ellos Capitana Marvel.
En medio de este encuentro final con el destino, varios héroes pierden presencia, no sabemos si a propósito o no, en favor de los seis Vengadores originales.
Avengers: Endgame es una cinta que vale la pena ver por la reconciliación hermosa y triste que ofrece a todo un universo de superhéroes.
Porque si la ves vas a reír, a llorar y luego a reír llorando; y habrá valido las tres horas, habrá valido la espera, habrá valido cada maldito segundo.