Hace poco fui y dediqué dos días y medio a conocer la capital de la República Dominicana. Una ciudad que ofrece más de lo que muchos creen. Así que en este artículo te cuento qué fue lo que yo hice en mi tiempo en Santo Domingo, y cómo podrías pasar tus días en la capital Dominicana.
DÍA 1: Zona Colonial de Santo Domingo
El primer día completo en Santo Domingo lo dediqué a conocer la zona colonial. Santo Domingo es una ciudad en la que se puede recorrer los principales puntos turísticos en un solo día. Sin embargo, yo quise tomarlo con calma, recorrer un día unos puntos y al siguiente día otros puntos. No correr y observar con calma como es la vida cotidiana de los dominicanos en su ciudad capital.Ya en la zona colonial visité lugares importantes como por ejemplo, la Calle del Conde, una calle muy popular de comercio y restaurantes en la zona colonial. Me senté a tomar una cerveza y probar el Mofongo frente al Parque Colón y observé la Catedral Primada de América, que es la primera catedral construida en toda América.
Pasé por el Panteón de la Patria, llegando al museo de las Casas Reales. Este es un museo construido en 1511 que servía para albergar oficinas gubernamentales como la Real Audiencia. Vi unos cañones colocados enfrente del museo y este carrito curioso también mientras paseaba una tarde de domingo y observaba la vida local.
Después de sentarme un rato frente a este museo seguí caminando hasta llegar a la Plaza de España, una plaza histórica que solía ser el centro comercial y social en la colonización y que hoy sigue siendo un centro con mucho movimiento, donde hay muchos restaurantes y bares para disfrutar.
Con esto terminaba mi día. Y aunque yo no llegué a verlos, también te recomiendo incluir en este día a la Fortaleza de Ozama y al Monasterio de San Francisco.
DÍA 2: Parque de los Tres Ojos y Faro a Colón
Por la mañana fui a un interesante parque que te hace sentir que estás completamente fuera de la ciudad pero en realidad el parque está dentro de la misma. Estoy hablando del Parque Nacional los Tres Ojos. Este peculiar parque tiene una serie de cavernas que terminan en unas lagunas de colores muy vivos y aguas muy cristalinas.El parque en realidad es pequeño. Consta de tres lagunas, de ahí el nombre de tres ojos, y no es para nada difícil acceder a cada laguna. Lo que sí es que no te puedes meter a bañar. Solo puedes admirarlas desde afuera, y cada una de las lagunas tiene profundidades distintas, siendo la más profunda de hasta 6 metros.
Faro a Colón
Al terminar aquí te recomiendo visitar el siguiente punto que está muy cerca, el Faro a Colón. Este es un monumento grande construido en honor a Cristóbal Colón, y del que de noche emanan luces apuntando hacia el cielo formando una cruz. Dentro de la estructura hay un museo, pero no dejan tomar fotos ni videos por lo que no les puedo mostrar esa parte.Cuando fui estaba muy vacío, era un lunes y no había nadie. Por cierto afuera del monumento hay un papa móvil, ese carro famoso en el que se transporta el papa. Pero la verdad no entendí qué tenía que ver ese papamóvil con la estructura.
Malecón de Santo Domingo
Después de almorzar y bajo el fuerte calor de Santo Domingo, me fui a recorrer el malecón de Santo Domingo. Después de estar recorriendo por un tiempo me topé con la sorpresa de encontrarme un obelisco. Digo sorpresa porque en lo que yo había investigado de Santo Domingo antes de ir, nunca me topé con que había un obelisco.Además de toparme con un par de ruinas en el camino, después del obelisco comencé a llegar a una parte de Santo Domingo más moderna. Lo colonial quedaba atrás y empezaba a ver edificios modernos. Me sobró tiempo así que decidí volver a la zona colonial para terminar de recorrer lo que no pude recorrer el día anterior. Y así de esa forma terminaba mi visita por Santo Domingo.
Espero te haya servido esta información para planificar tu viaje a la capital de la República Dominicana.