Título original: Mary Poppins Returns
País: Estados Unidos
Año: 2018
Duración: 130 min.
Director: Rob Marshall
Productora: Walt Disney Pictures / Lucamar Productions / Marc Platt Productions
Puntuación pandástica: 2/5
Precuelas, secuelas, remakes, reinterpretaciones y homenajes. De esto vive el cine últimamente. ¿Me parece bien? No. ¿Voy al cine a ver otra de Mary Poppins? Si. El ser humano está lleno de contradicciones. Espero algún día poder tratar en profundidad lo que yo llamo la falta de imaginación en Hollywood pero de momento el tema que nos concierne es El regreso de Mary Poppins.
Antes de empezar… no, no sale Julie Andrews pero sale Angela Lansbury vendiendo globos (lo de escribir crímenes no pegaba en este contexto). Mary Poppins featuring La bruja novata, me sirve. Y si, si sale Dick Van Dyke.
Yo soy muy fan de Mary Poppins (pero mucho) y muy poco fan de las secuelas/homenajes actuales por lo que, en principio, soy una espectadora difícil de conquistar. La película no me ha encantado pero se esfuerza por mantener la atmósfera y la magia original.
En esta nueva película, Jane y Michael Banks se han hecho mayores. Jane es soltera y vive en un piso en el centro (aunque pasa la mayor parte del día con su hermano). Michael tiene tres hijos: John, Annabel y Georgie. La situación económica de la familia es delicada desde que Michael se quedó viudo y la familia Banks está a punto de perder la casa familiar. En medio de esta situación aparece Mary Poppins dispuesta a ayudar una vez más a los hijos de los Banks.
Puede que parezca que la nueva película se aleja un poco de la original pero nada más lejos de la realidad. En la primera película el Señor Banks era un banquero ocupado y un padre distante, en esta ocasión Michael, al que recordábamos como un niño soñador, se ha convertido en una copia de su padre debido a la presión de sus deudas. La Señora Banks era el contrapunto de su marido, una mujer alegre y luchadora, carácter que se ve reflejado en su hija Jane que se nos presenta como una mujer sindicalista y soltera (recordemos que son los años 30). Por último, si antes teníamos a Bert el deshollinador ahora tenemos a Jack el farolero.
En cuanto al elenco, Emily Blunt hace un muy buen trabajo. Elegante y comedida recuerda en muchos momentos a Julie Andrews aunque Julie siempre será mi Mary Poppins. Lin-Manuel Miranda por su parte hace un gran trabajo como Jack el farolero. Creo que aporta ese carisma y dulzura que necesita el personaje y te alegras de que esté presente en muchas escenas. Meryl Streep nunca hace nada mal aunque podrían explicarnos de donde ha sacado ese acento (por lo menos en la versión española…). Ben Whishaw (Michael Banks) y Emily Mortimer (Jane Banks) defienden sin problema sus personajes y Colin Firth… que decir… pues que siempre es bien. Mencionar a Julie Walters que interpreta a Ellen y que nos regala la mayoría de momentos cómicos de la película y, por supuesto, a los niños Banks (Pixie Davies, Nathanael Saleh y Joel Dawson) que salvan sus papeles maravillosamente.
La sensación que me dejó esta película fue de está bien pero quiero ver la original otra vez. Las canciones son animadas pero, a mi parecer, mucho menos pegadizas que las originales. La puesta en escena y la coreografía recuerdan a la original pero siempre me quedaba con la sensación de que faltaba algo. Siempre hay un pero… en fin, una película que huele a homenaje más que a secuela. Colorida, clásica, animada y coreografiada al más puro estilo de la Mary Poppins del 67. Rob Marshall nos hace felices renunciando al CGI para que podamos disfrutar de una animación 2D casi igual a la original. Guiños constantes, personajes que vuelven en la piel actores que conocemos y canciones que suenan de fondo y emocionan. Nostalgia que llega a su punto cumbre en los títulos de crédito finales cuando aparecen esas letras amarillas sobre una imagen del Londres de nuestra Mary.
Puede que se parezca demasiado a la original, puede que sea un remake disfrazado de secuela y es precisamente eso lo que no me ha dejado disfrutar de ella. Me da pena porque me gustaría haberla disfrutado más pero no me he podido quitar la original de la cabeza… Así todo es una película correcta que recomiendo ver.
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