Francesc Miralles
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Mirad qué buenísima lectura me ha enviado Sandra Bruna. ¡Mil gracias a esta agencia! La verdad es que tenía muchísimas ganas de cambiar de temática y me he ido un poquito al lado oscuro satisfaciendo totalmente mi ansia de curiosidad.
Me ha parecido una novela muy interesante que ya tiene todas las papeletas para convertirse en una de las mejores lecturas de este 2018. Me ha enganchado muchísimo, tiene una lectura muy ágil con capítulos breves y en su interior muchos poemas, letras de canciones y artículos de periódico que lo han hecho más que interesante.
Tenía muchas ganas de volver a leer a este autor por separado después de haber disfrutado de Pulsaciones y Latidos que escribió Francesc con Javier Ruescas y no me he equivocado. En esta ocasión he acompañado a Rai, un chico que acaba de sufrir una ruptura amorosa repentina justo en el momento en que se encuentra solo en casa pues sus padres de han marchado de vacaciones y de casualidad se cruza en su vida una persona muy especial que le mostrará el camino de la oscuridad hacia las catacumbas.
Y es ese mundo subterráneo alejado del sol el que me ha llamado tanto la atención y me ha tenido enganchada desde la primera página. Es misterioso sin dar miedo, un refugio para aquéllos que huyen de la vida diurna y sus consecuencias, con personajes que atraerán tu atención y que quizás te hubiese encantado conocer en tus peores momentos. Se lo recomiendo sobre todo a público juvenil, que esté cansado de las historias de siempre, que busque algo realmente distinto y también si has pasado por una ruptura o situaciones que te hicieron querer abandonarlo todo y desaparecer del mundo. ¡Creo que te encantará!
Fuente: este post proviene de Diario de una Chicka Lit, donde puedes consultar el contenido original.
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