Empar Fernández
Querido diario:
De nuevo quiero dar las gracias al grupo Penguin Random House y a la Agencia Sandra Bruna por este ejemplar, desde que lo vi, sentí curiosidad por sus páginas:
Corre el año 1918 y la Primera Guerra Mundial está desmoronando Europa cuando Gracia Ballesteros se ve obligada a abandonar precipitadamente Barcelona.
En Burdeos conoce a Carter Irvine, un joven americano que se ha alistado como voluntario para luchar en el Viejo Continente, y entablan una relación que deberá superar la distancia y los peligros que les acechan. Mientras tanto, a su alrededor, cada vez más personas aparentemente sanas mueren por culpa de la gripe, una epidemia que aterrorizará al mundo.Cada vez me alegro más de haber nacido en esta época, pero mi curiosidad por acontecimientos pasados me hacen sumergirme con mucha facilidad en libros dedicados a recordar a través de novelas como ésta.
En este caso, esta historia nos la van a contar entre dos personajes: Carter y Gracia con capítulos muy breves de esos que hacen pasar páginas rápidamente y cuando te vas a dar cuenta, te has zampado la mitad de la novela casi sin pensarlo.
Lo mejor de esta ambientación es que puedes hacer un gran ejercicio de empatía pues la vida que les tocó vivir a estas personas nada tiene que ver con la nuestra, rodeados de miedo, incertidumbre y una enfermedad que se está llevando miles de vidas, encontramos una pequeña flor entre todos esos escombros que es la historia de amor que une todos los hechos históricos que saca a relucir porque es curioso cómo en las circunstancias más extrañas puede surgir el amor.
Y a todo ésto qué más se le puede pedir, está claro, mujeres luchadoras que piden mejores condiciones para que puedan comer sus hijos, como se puede apreciar, historias desgarradoras que te pondrán el vello de punta mientras disfrutas de la lectura en la comodidad de tu butaca preferida, ¡qué hermoso contraste entre la lucha de los personajes y la expectación del lector!
Yo os invito a que paséis por las cuatro estaciones de esta novela y os reto a que descubráis como yo, a una autora a la que me gustaría seguir leyendo pues cautiva con facilidad. Creo que realmente merece la pena darle una oportunidad porque estoy segura que, entre estas páginas, vais a encontrar muchísimas cosas que os van a estar llamando la atención capítulo a capítulo.