Sinopsis: En esta historia llena de lujuria, locura y éxtasis, habitan doce personajes distintivos que vivieron en la misma región del centro de Inglaterra durante un período de seis mil años. Sus narraciones se entrelazan a través de acontecimientos recurrentes, extrañas tradiciones y visiones misteriosas.
Reseña: "La voz del fuego" fue la lectura escogida para el Club de lectura Chronos del mes de abril. Mi experiencia como lectora con Alan Moore no había ido más allá de sus guiones para cómics (Watchmen, V de Vendetta, Batman: La broma asesina, entre otros). Esta es su primera novela, escrita en el año 1995 (esta estupenda edición de Roca Editorial es de febrero de 2018) y en ella el autor nos transporta a Northhampton para explicarnos, mediante doce cuentos a través del tiempo, una serie de historias que a priori parecen no tener relación hasta que avanzamos en la lectura de la novela.
La primera de ellas es una auténtica prueba de fuego (nunca mejor dicho!). Ambientada en el año 4000 a.c., el protagonista es un joven primitivo que narrará su historia como buenamente puede, es decir; empleando una versión tosca del lenguaje, y con descripciones de cómo ve el mundo a su manera, ignorante y temerosa de todo aquello que no logra entender.
Entrar en el juego del narrador puede ser un ejercicio de fuerza de voluntad y de paciencia, algo que también debió costar a la traductora, Eugenia Vázquez: desorden en las frases y faltas de ortografía (intencionadas, no os asustéis!) que pueden parecer un galimatías en las primeras frases. Dadle una oportunidad, os sorprenderá.
Las siguientes historias ya están escritas en un idioma más cercano al nuestro, lógico con la evolución del lenguaje, y a medida que avanzan los años empezamos a comprender la magnitud de la obra de Alan Moore; gracias a su prosa veremos cómo a través de los años las sociedades avanzan en temas como la religión (O no siempre!). En cómo el fuego es parte importante en la evolución de la sociedad pero también puede impedir su avance.
Al ser un libro "de relatos" puede que algunos gusten más y otros menos, a gusto del lector, pero casi todos tienen un punto tétrico, oscuro y a la vez fascinante. El sexo y la violencia forman parte de estos mapas de lo subterráneo por los que transcurre la novela, y los encontraremos en brujas quemadas en la hoguera, en locos que tal vez no lo sean tanto, en jueces de dudosa moral o en asesinas en busca de fortuna.
En resumen: una obra peculiar en su desarrollo. Al narrarse a través de relatos puede que quede cierta sensación de "desconcierto" entre uno y otro, pero si entras en el juego que propone Alan Moore disfrutarás de una buena historia, excelentemente narrada y con unos personajes que no olvidarás fácilmente.