Carmen Calero
Querido diario:
No te extrañará que te escriba en forma de carta, me ha parecido el formato ideal para este libro. Me siento muy agradecida hacia la Editorial Punto Rojo que me lo facilitó. Lo que más me llamó la atención de él fueron las cartas. Sabes que adoro el correo postal y no podía dejar pasar la oportunidad de leer un libro escrito en este formato y más con esa portada tan bonita, rematándolo con una sinopsis sobre una historia de amor por correspondencia.
La idea que eligió la autora para escribir esta novela me pareció preciosa, pero me ha decepcionado. Quizás tenía expectativas demasiado altas, debido a mi pasión por el correo tradicional. No estoy muy acostumbrada a leer novelas de amor, pero cuando me conquistan, las convierto en mis favoritas, en este caso, no ha podido ser. No ha tenido nada que ver la historia pues no he conseguido terminar de leerla. Las razones las encuentro en la habilidad para escribir de la autora.
He estado investigando y al parecer Carmen Calero suele escribir poesía. Se nota mucho esta influencia en su forma de narrar. Pero adolece de otras muchas cosas. Por poner ejemplos claros podría hablar de las faltas de ortografía que, sintiéndolo mucho, conmigo han encontrado a una lectora altamente exigente. No solo le sobraban comas y faltaban puntos, que además, me hacían perder la fluidez al leer. La carencia de divisiones por capítulos no me molesta en exceso, pero la falta de tildes no la tolero con demasiada facilidad. Por otro lado, las repeticiones de palabras en una misma frase me sugieren que precisa de una segunda lectura o la ayuda de un lector cero. El hecho de utilizar en repetidas ocasiones el interrogante solo al final de la frase lo hubiese entendido en el caso de una mala traducción del inglés pero me consta que este libro se ha escrito directamente en español.
Pero tras ver estos fallos en la escritura, (nótese que no hablo del contenido pues no me he podido concentrar en la historia debido a que la forma no me permitía disfrutar de los personajes) finalmente la he abandonado. No simpatizo con los cambios bruscos de registro, pues un párrafo está narrado con figuras retóricas al estilo de épocas pasadas y el párrafo siguiente se lee como una novela contemporánea, esto último me ha descolocado demasiado. Finalmente, me ha disgustado bastante que la autora incidiera tantísimo en describir rutinas que nada tenían de trascendentes con respecto a la historia y sin embargo, pasara de puntillas con expresiones locales que dejó de explicar, dándolas por entendidas, de forma que provocaba cambios, para mi gusto, excesivamente bruscos en los niveles culto y coloquial del habla.
Me ha gustado mucho la temática elegida por la autora, me hubiese gustado saber cómo acaba el romance aunque tengo cierta sensación de previsibilidad. Quiero animar desde mi blog a que nunca dejéis de leer, a darles oportunidades a nuevos talentos pero sobre todo a autores como Carmen quiero darles un empujón de energía para que sigan leyendo y escribiendo mucho, que se documenten, se rodeen de profesionales que les ayuden con su pasión pero sobre todo que nunca abandonen lo que más les gusta pues un día volverán la vista atrás y se enorgullecerán al ver el camino recorrido.
Por supuesto, ésta es solo una humilde reseña de una lectora cualquiera que puede ser tenida en cuenta... o no. Tanto si compartes mis opiniones como si son contrarias, por favor, responde con honestidad esta carta y siéntete libre de comentar conmigo sobre ésto que nos tiene tan enamorados: la lectura.
Recibe un cariñoso abrazo
Una lectora