En su aventura le acompañarán su hipocondríaco amigo Dandy y dos chicas flipadas con Robbie Stamp, una escritora de ciencia ficción que vive en el anonimato terrestre mientras en Rethrick sus libros son auténticos bestsellers.
Gracias a Wendy, una simpática nave-furgoneta, llegarán al corazón de Winona en la Tierra, desde donde se emitirá el programa de mayor audiencia: EL SHOW DE GROSSMAN.
Reseña: Laura Fernández siempre ha intentado colarse en mi lista de lecturas con cualquiera de sus obras, ya sea por sus alocadas sinopsis o sus cuidadas imágenes de portada. Finalmente llegó el momento de conocer el alocado mundo de El Show de Grossman tras leer el relato incluído en Poshumanas.
Matson quiere conocer a su madre, una humana de la que apenas tiene unas pocas pistas. Sabe que le gustan las palomitas y que trabaja como camarera en local llamado “La autopsia del marciano”. Para tal empresa convence a sus amigos y a la furgoneta/nave espacial WENDY para viajar a la Tierra y encontrarse con ella. Bajo esta sencilla premisa, la historia de El Show de Grossman se sucede a base de capítulos cortos bajo distintos puntos de vista de un buen puñado de personajes a cada cual más surrealista y más raro que el anterior.
La obra arranca, para mi gusto, algo atropellada. Da la sensación que la autora quiere contarnos tantas cosas que se hace confusa en su desarrollo inicial, aunque en apenas unas páginas seremos una rethrickiana más, deseando saber más de su planeta o aprender a jugar al RocketBol. Laura logra conectar con el lector utilizando diálogos cortos pero ingeniosos, descripciones de cuatro pinceladas pero concisas y mucho sentido del humor.
No cuesta imaginar El show de Grossman como una serie (personalmente, apuesto por la animación) gracias a la estructura de la novela y a las peculiaridades de sus personajes. La nave WENDY o Robbie Stamp, una autora que triunfa en el planeta Rethrick pero que en la Tierra apenas tiene reconocimiento. O el padre de Matson, empleado bajo las órdenes de Grossman y que ha descuidado a su hijo a causa del trabajo. Como veis, son temas que se nos hacen muy cercanos a pesar de estar ambientados en otros planetas.
Además cuenta con unas estupendas ilustraciones de Martín López que complementan la novela con un toque original. Una buena edición, como acostumbran a hacer en la editorial Aristas Martínez.
En resumen: Una divertida novela de ciencia ficción, algo bizarra en ocasiones, cómica y bien hilada que hará las delicias de los lectores. Escribir humor es realmente complicado, y Laura Fernández aprueba con buena nota. Puntuación: 4/5.
Consíguelo en la web de la editorial Aristas Martínez.