La catedral del hierro
Un recorrido por la industria del hierro y la minería en el valle leonés de Sabero
© Texto y fotografías: JAVIER PRIETO GALLEGO
Tiene planta de catedral gótica y espacio para albergar un mar de peregrinos. O un concierto multitudinario de cánticos gregorianos. La sucesión de arcos apuntados hace imaginar el casco de un barco visto al revés y desde dentro. Y hasta el eco es el mismo que el que rebota en el interior de un templo.
Maquina de vapor en la Nave neogótica de la Ferrería de San Blas. Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León. Localidad de Sabero. León. Castilla y León. España © Javier Prieto Gallego Ecos ininteligibles que se pierden en las alturas para mezclarse con otros ecos del pasado y pasar a formar parte de una extraña amalgama de sonidos. Los que llegan de aquellas etapas en las que fue salón de baile, iglesia, plaza a cubierto, polideportivo y tantas ocurrencias más. Gracias a ellas este buque panza arriba, esta catedral del hierro, consiguió sortear las turbulencias del tiempo, evitar la piqueta y sobrevivir al virus de la indiferencia y el derribo. Por los pelos, eso sí. Hoy, ese costillar de piedra y ladrillo alberga las instalaciones del Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León, un marco perfecto para rendir el homenaje que se merecen las generaciones que encontraron en esa industria la forma de sacar adelante sus vidas.
A veces la historia sorprende con revelaciones insospechadas. Como por ejemplo, la que cuenta que el valle de Sabero fue el lugar escogido para instalar en él la primera ferrería que funcionó con carbón de cok en España. Corría el año 1840 cuando la Sociedad Palentino-Leonesa de Minas dio los primeros pasos para hacer viable una explotación tan arriesgada como titánica. Unos años antes los ingleses ya habían hecho prospecciones aquí mientras buscaban carbón para sus empresas y el problema que la Sociedad Palentina-Leonesa se aplicó en resolver fue la dificultad que existía para sacar el carbón del valle y transportarlo hasta uno altos hornos que las montañas cantábricas convertían en inalcanzables. Fue así como Sabero se subió al carro de la revolución industrial en los puestos de cabeza: entre 1841 y 1847 comenzaron a funcionar en el valle los primeros altos hornos a la inglesa construidos en España con el fin de aprovechar el carbón in situ y producir el hierro aquí mismo. En 1847 comenzó a fabricarse, por primera vez en España, hierro en un alto horno de cok. Para ello había sido necesario traer hasta el valle la maquinaria fabricada en Inglaterra, transportarla desde Gijón a través de las montañas y montarla aquí. El vapor, la energía punta del momento, comenzó a mover entonces los gigantescos engranajes que hicieron de la fábrica de San Blas una de las más modernas de Europa. Muchas de las tuberías de hierro del Canal de Isabel II se hicieron aquí.
Cuerpo de engranajes. Nave neogótica de la Ferrería de San Blas. Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León. Localidad de Sabero. León. Castilla y León. España © Javier Prieto Gallego La ferrería de San Blas, cuyas instalaciones acogen hoy el espacio del museo, estuvo en funcionamiento hasta 1862, apenas 16 años en los que la siderurgia no consiguió el despegue definitivo. La falta de infraestructuras para sacar la producción del valle continuó siendo el principal imponderable y habría que esperar la llegada del ferrocarril, en 1899, para que el carbón que se extraía pudiera ser transportado hasta Cistierna para incorporarse después al hullero de La Robla que lo llevaba hacia Bilbao. Para entonces el valle de Sabero se había convertido ya en un valle minero y sus gentes vivían –y padecían- los rigores que supone tener que buscar el pan en las oscuras entrañas de la tierra.
La nave que acogió aquellos engranajes y martillazos de Titán, junto a los restos del alto horno, son los únicos vestigios que quedan en España de aquel momento de despegue industrial en la Península. Por eso se revela también como un marco perfecto para hacer un repaso sobre la historia y peculiaridades de una industria de la minería que siguió desarrollándose en el valle durante 150 años, hasta su cierre definitivo en 1991.
Reproducción de una farmacia en el Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León. Localidad de Sabero. León. Castilla y León. España © Javier Prieto Gallego
EN MARCHA. A Sabero puede llegarse desde Cistierna tras tomar el desvío, que a 4 km en dirección a Riaño, arranca hacia Boñar.
EL MUSEO. La nave de forja y laminación de la ferrería de San Blas fue construida entre 1840 y 1846. El recorrido por su interior sirve para conocer la historia minera del valle, la de la ferrería y la relación del hombre y el entorno, la evolución de las formas de trabajo, de las herramientas, de los sistemas de seguridad en el interior de las minas o de la asistencia social. La reconstrucción de una pequeña farmacia recuerda que los mineros del valle contaron con uno de los mejores hospitales de León en su momento.
INFORMACIÓN. Museo de la Minería: tel. 987 71 83 57. http://www.museosm.com/.