Nadie puede negar que los últimos años, el gigante californiano Disney se ha lanzado a una carrera por rentabilizar al máximo sus obras de animación catalogadas como “Clásicos Disney” y lo está haciendo con una técnica acción real (life action). Hasta el momento, se han sucedido por nuestras pantallas títulos como “Alicia en el país de las maravillas”, “Dumbo”, “El rey león”, o “Aladdín”, algunas con gran éxito en taquilla, aunque la mayoría de ellas han recibido más palos (tanto de la crítica especializada como de espectadores) que elogios.
El complejo y convulso (gracias a la pandemia mundial del Covid-19) 2020 y después de varios retrasos, se estrenó entre una gran polémica una cinta que había sido llamada a ser una de las grandes del 2020, “Mulan” aunque claro, su polémico estreno no vino dado por el cambio de temática de la película, ni por su falta de calidad, sino porque al final, Disney optó por dar el espaldarazo a las salas de cine de todo el mundo y estrenar su remake de “Mulan” por su plataforma de streaming Disney+ bajo pago directo, para todo el mundo, de casi 22 €.
Como es evidente, tanto los miembros de este equipo, como una inmensa mayoría de espectadores, no caímos en semejante trampa, y esperamos a su liberalización, la cual acabó llegando a comienzos de diciembre y hoy, en este pequeño rincón os contaremos nuestra visión de “Mulan”.
La historia de “Mulan” empieza desplazándonos al China Imperial, donde nos encontramos con una chica activa, divertida y aventurera quien causa más de una decepción a sus tradicionales padres, se trata de Hua Mulan. Como Mulan (a quien da vida Liu Yifei) debe seguir la tradición de ser una buena mujer y esposa de un buen marido, sus padres la envían a una casamentera, aunque algo acaba saliendo muy mal.
Paralelamente a esto, unos intrépidos guerreros Rouran capitaneados por el duro Bori Khan y la bruja Xianniang (quien dispone de una alta capacidad para convertirse en diferentes personas) inician el ataque contra las fuerzas de la China Imperial. Sin pensárselo mucho, el Emperador emite un decreto ordenando que, cada familia debe aportar a la defensa del país, un hombre.
En la familia de Mulan esto es totalmente imposible, ya que el único hombre es su padre y este tiene tan delicada la salud que no soportaría el ejército. Por eso, y a escondidas de todos, Mulan roba la armadura y la espada de su padre y huye a caballo con dirección al campo de entrenamiento.
A las órdenes del comandante Tung, Mulan se entrena disfrazado de hombre junto con el resto de soldados novatos. Antes de finalizar su formación, Tung y sus cadetes son llamados a la guerra ante el avance del ejército de Khan.
Ya en el campo de batalla, Mulan se enfrenta a Xianniang quien descubre que es una mujer antes de, tener que huir ante la fuerza de la armadura de Mulan. Finamente Mulan, utilizando sus artes de guerra, logra provocar una avalancha y enterrar a los Rourans en la nieve, aunque para ello ponga al descubierto su verdadero sexo.
Mulan en un momento de la lucha contra los Rourans
Expulsada del ejército, una Mulan derrotada emprende el camino de regreso a su casa, aunque por el camino, se encuentra con una Xianniang que le confiesa que ella también sufre el rechazo de su gente y que, los ataques de los Rourans son solo una cortina de humo, porque Khan lo que pretende es matar al emperador.
Aún a riesgos de enfrentarse a la pena de muerte, Mulan reúne a sus amigos del campamento de formación y se dirigen hacia la capital donde les tocará desencadenar una lucha sin cuartel contra Khan y sus tropas para salvar al emperador.
¿Lo conseguirá, ¿no? ¿Ha cambiado el final Disney en esta adaptación? Nosotros tenemos estas y más respuestas, aunque como ya os podéis imaginar, nos las quedaremos para nosotros. Lo que no nos quedaremos es nuestra visión sobre este nuevo remake del clásico de animación de “Mulan”.
En esta versión en live-motion de 2020 del clásico de “Mulan” lo primero que nos sorprende es el cambio radical de Hua Mulan, y no físicamente, sino como concepto de personaje, ya que, en la cinta de animación, Mulan era una chica normal que luchaba además de contra los rivales, contra los cánones machistas sociales, mientras que en esta versión nos encontramos con una chica que, desde los primeros minutos, destila unos fuertes tintes de heroína con grandes capacidades para los saltos y la lucha.
A partir de esta premisa, enseguida nos podemos dar cuenta que, tanto el drama como el humor que imperaba en la película original se ha diluido completamente en esta, convirtiéndose en una cinta claramente de acción privándonos como espectadores del sentimiento de identificación o empatía, sentimiento que no consigue ni con la incorporación del tándem de villanos (Khan y Xianniang).
Interpretativamente, damos nuestro aprobado a la casi desconocida Liu Yifei (Hu Mulan) quien pese a tener un personaje desprovisto de carga dramática y humorística, soluciona bien las escenas de lucha/coreografía que le toca interpretar. Camino similar siguen el resto de protagonistas secundarios, pero tanto, sin objeciones ni alabanzas para el casting de esta versión de “Mulan”.
Por todo lo que os hemos contado, y teniendo en cuenta que, para los miembros de este equipo, esta versión del clásico es completamente prescindible y la consideramos más una opción para tener un título más en la filmografía de Disney que una buena película, le damos a esta “Mulan” una nota final de 4.5 sobre 10.
Título original: “Mulan” – USA – 2020
Dirigida por: Miki Caro
Duración: 115 minutos
Género: Secuela, Acción,