A mi particularmente me encanta la palabra española ” Duende” (nada que ver con el significado de “duende” como ese ser fantástico de jardines y cuentos, travieso y jugueton) y la portuguesa de Brasil “Cafuné”.
En nuestro idioma “minayero” también hay varias palabras que tampoco tienen traducción pero si mucho significado, merecería la pena hacer una recolección de todas ellas.
En el portugués de Brasil, quiere decir “acto de acariciar el pelo de otra persona de manera tierna”. Es decir, la manera en que acaricias el cabello a alguien a quien quieres mucho (o a tu mascota).
¡Una palabra española! Y que menos que duende, que no hace referencia a esos bichillos mágicos que habitan en los bosques, sino al “misterioso poder que una obra de arte tiene para conmovernos profundamente”.
En noruego, se refiere a “cualquier cosa que puedes poner sobre una rebanada de pan”. Mantequilla, queso, tomate, jamón, olivas, pepinillos, chili, salmón y hasta yogur: todo lo que se pueda poner sobre una rebanada de pan entra dentro de la categoría de “palegg”.
En árabe, “cantidad de agua que puedes retener en una mano”. Una medida que varía según el tamaño de la mano de cada uno.
Del japonés, “chica bonita cuando es observada de espaldas”. Supongo que todos nos hemos decepcionado alguna vez con alguien que de espaldas parecía muy apuesto y que, al girarse… pues no lo era tanto.
Del judío, se refiere a una persona que siempre tiene mala suerte, aunque ya se sabe, la suerte no sonríe a todos por igual. Un “gafe” de toda la vida.
¡Un poco de humor japonés! Cuando vas a la peluquería y el peluquero en vez de cortarte las puntas te corta media cabellera, o se equivoca con el tinte, entonces tu peinado es un age-otori, porque “te ves peor que antes de cortarte el pelo.
Para los japoneses, una kyoikumama es aquella que “empuja implacablemente a sus hijos hacia el éxito académico”. La ilustración es bastante explícita…
Del francés, “impulso instintivo que empuja a saltar desde lugares altos”: lo que debe sentir Spider-man o cualquier superhéroe que se precie cuando tiene que saltar de rascacielos en rascacielos.
Traducido literalmente quiere decir “persona de aire”, y en judío se aplica a todos aquellos soñadores que están más en las nubes que en tierra firme.
En sueco, se refiere al acto de rellenar una taza de café por tercera vez.
En alemán, hace referencia al “miedo a la disminución de oportunidades a medida que se envejece”. Por ejemplo, si tienes miedo a que dentro de unos años no podrás patinar con tanta soltura como ahora, o a que una lesión te impida seguir jugando a baloncesto, eres víctima del Torschlusspanik.
En alemán significa “placer que se produce al ver la desdicha de otro”. Aunque en el caso de tu peor enemigo tu sentimiento de Schadenfreunde estaría justificado, seguramente sientes lo mismo cuando tu mejor amigo (el listo de clase) suspende y tú no.
En Rapa-Nui o pascuense (el idioma de la Isla de Pascua), quiere decir “acto de coger objetos que uno desea de la casa de un amigo pidiéndolos prestados sistemáticamente”. Si ves que uno de tus conocidos no para de pedirte cosas y nunca las devuelve… empieza a sospechar, puedes estar siendo víctima de tingo.